El avión que vemos en la imagen del archivo del maestro Juan Arráez Cerdá está estrechamente unido a la historia apasionante de Rodolfo Bay Wright (1910-2000), comandante de Iberia y fundador de Spantax. Se trata del único De Havilland “Mosquito” B.Mk 35 que ha volado con matrícula española (EC-AKH), inscrito el 22 de junio de 1956 en el registro aeronáutico nacional.
En origen había sido un bombardero de la Segunda Guerra Mundial, propulsado por dos motores Rolls Royce Merlin, de 1.700 caballos, que le permitía volar a una velocidad de 685 km/h y una altitud cercana a 11.000 m. Tenia la cabina presurizada y Bay lo compró en Inglaterra en 500 libras esterlinas cuando apenas tenía 16 horas de vuelo. El vuelo hasta Madrid lo hizo de la mano del piloto británico Peter Nock.
Recuerda Jaime Velarde Silió que Rodofo Bay voló con este avión a Villa Cisneros para cargar langosta viva con destino al mercado balear. En este aparato, el histórico personaje al que tuvimos el honor de conocer, se soltó “a la brava” sin doble mando. En 1957 vendió el avión y su comprador cruzó el Atlántico luciendo la matricula española. Con el avión en Canadá operado por Airmotive Minesota, el 23 de agosto de 1957, cuando intentaba tomar tierra en la pista corta del aeropuerto de Kenora (Ontario), se salió de límites y quedó destrozado. Los dos ocupantes resultaron ilesos.
Foto: Archivo de Juan Arráez Cerdá