La autorización del Consejo de Ministros, el pasado 12 de septiembre, para formalizar el contrato para la adquisición de un Sistema Aéreo de Vigilancia Multisensor, llamado a sustituir a los aviones de patrulla marítima (MPA) y vigilancia marítima (VIGMA), es una excelente noticia para la industria aeronáutica y electrónica y para el Ejército del Aire y del Espacio.
Según el digital especializado defensa.com, la nueva denominación de Sistema Aéreo de Vigilancia Multisensor sugiere la adquisición de 16 aviones con una configuración similar y apta para ambos roles.
Un contrato estimado en 2.034 millones de euros, que se traducirá en 16 nuevas aeronaves y permitirá recuperar las capacidades necesarias para garantizar los compromisos con la OTAN.
En junio pasado, el Consejo de Ministros aprobó la compra de seis aviones C295W de patrulla y vigilancia marítima MPA para el Ejército del Aire y del Espacio, lo que permitirá recuperar y ampliar la capacidad de patrulla marítima tras la baja de los aviones P-3 Orion.
El programa VIGMA supone diez aviones C295W modificados para misiones de vigilancia marítima y misiones SAR, que sustituirán a los ocho CN235 en servicio.
Foto: Airbus Defence and Space

