Se cumplen veinte años del hundimiento del petrolero “Prestige” (IMO 7372141) frente a las costas de Galicia, ocurrido a unas 130 millas de Finisterre. Este suceso provocó uno de los mayores desastres ecológicos de la historia contemporánea de España y también afectó a Francia y Portugal. Diversos medios de comunicación recuerdan en estos días la aciaga efeméride, y entre un reportaje en dos partes de La Sexta, en la que se aprecian algunas contradicciones entre sus coprotagonistas.
El citado petrolero transportaba un cargamento de casi 76.972 toneladas de fuel y tras varios días evolucionando para su alejamiento de la costa gallega, el casco quebró y acabó hundiéndose. Situación que, además del desastre ecológico, provocó una crisis política y generó una notable controversia en la opinión pública, lo que dio origen al nacimiento de la plataforma Nunca Máis, expresión de una ola de solidaridad para la limpieza de la costa afectada del chapapote y reclamó responsabilidades medioambientales, judiciales y políticas.
En los siguientes enlaces, los lectores pueden encontrar las opiniones profesionales sobre este caso del capitán Carlos Peña Alvear (parte I y parte II) y del jefe de máquinas Juan Cárdenas Soriano (enlace aquí).
Fotos: Salvamento Marítimo y Bourrichon
1 comentario
La crisis política fue bastante limitada, el PP a pesar de su espantosa forma de gestionar la crisis (tanto antes como después del hundimiento) no sufrió en las elecciones generales y menos aún en las gallegas, donde subió en votos.
Aznar se inventó un Plan Galicia de reconstrucción que por supuesto nunca llegó.
¿Broca política? Bueno, en la calle quizás, algunos a quienes Fraga mandó «a ladrar su descontento por las esquinas». Vino a demostrar que la supremacía política de la derecha en España es casi inexpugnable, como se ha demostrado repetidamente.
Que hablen de uno aunque sea mal.