Se cumplen veinte días de la erupción del aciago volcán de La Palma y la pasada madrugada se produjo un nuevo derrumbe del cono volcánico por el lado norte, tras producirse a las 00,55 h local un sismo de magnitud 4,1. Un gran manto de lava gana terreno en varias direcciones que afecta a zonas que hasta ahora habían quedado indemnes. Un ensanche de la colada ha destruido casas y la antigua quesería, informa elapuron.com y discurre paralela, de momento, a la zona industrial de Los Llanos de Aridane.
La pasada noche el volcán registró una fase de mayor efusividad-explosividad y tras el sismo que provocó el derrumbe parcial del cono, “se ha vaciado por ambos frentes, a lados opuestos de la colada primaria, es decir, con rumbo norte y rumbo sur, aumentando considerablemente el aporte de lavas a unas nuevas coladas tan destructivas como las anteriores” informa Antonio Márquez, colaborador de Involcan. Las nuevas coladas avanzan a velocidad considerable y destruyen todo cuanto encuentran a su paso, dejando más dolor y desolación del ya causado y un espectáculo dantesco.
Foto: cedidas y Facundo Cabrera
