Royal Caribbean trata de contener las quejas y el miedo que han pasado los 4.180 pasajeros que viajan a bordo del megacrucero “Anthem of the Seas”, que han experimentado la desagradable sensación de un “huracán extremo” en el transcurso del viaje desde Nueva York hasta Port Cañaveral, donde el barco ha llegado hoy con daños de importancia en su interior.
En la época de la nueva tecnología, circulan en twitter, facebook y otras redes sociales imágenes de los destrozos producidos a bordo. El temporal ha sido de envergadura. Olas de 11,5 metros y vientos sostenidos de 65 nudos, que se hicieron especialmente presentes a lo largo de ayer.
El capitán se defiende, según la compañía, al asegurar que “las condiciones extremas de viento y mar, con velocidades de viento superiores a las previstas”. Royal Caribbean dice que en “un exceso de precaución”, el capitán pidió a los pasajeros que permanecieran en sus cabinas hasta que el tiempo mejorase. No hay información de daños entre los turistas, pero sí daños materiales diversos en áreas públicas y algunos camarotes.
En las redes sociales circulan críticas muy duras contra la actuación del capitán, del que dicen que esperó demasiado tiempo antes de tomar una decisión. Bien es verdad que la mayoría de los pasajeros no saben de navegación y de maniobra en caso de tormenta, que se intensificó con gran rapidez y durante al menos cuatro horas lo pasaron francamente mal.
El capitán informó a los pasajeros que estaba en comunicación con el U.S. Coast Guard y trataba de poner el buque proa al viento, pero que no podían avanzar. Las olas enfurecidas rompieron en la parte superior e inundaron la zona de piscinas. Las escoras producidas por el huracán fueron considerables, por lo que algunos pasajeros desobedecieron la indicación de permanecer en sus cabinas y se dieron cita en los puntos de reunión provistos de chalecos salvavidas.
El U.S. Coast Guard dijo que no había recibido ninguna llamada de auxilio del buque “Anthen of the Seas”, aunque permaneció en contacto cuando leyeron los mensajes de los pasajeros en las redes sociales. “En el barco dicen que todo está en orden y no han emitido llamadas de socorro”, agrega. El momento de mayor tensión se vivió cuando se encontraba frente a Charleston, con ráfagas de viento superiores a 80 nudos, informa la página web especializada gcaptain.com.
Fotos: NOAA y Jorge Rodríguez Suárez