Nuestra actividad informativa en el sector marítimo tiene momentos especialmente gratificantes, que son aquellos del encuentro con las personas, con las gentes de la mar y los barcos que aman su trabajo, viven su vocación y aprecian y valoran el trabajo que hacemos. Una línea de actuación, en nuestro caso, que se remonta a más de treinta años de actividad profesional en la prensa escrita y, desde 2009, en el entorno digital, en el que desde comienzos de este año hemos estrenado nuevo formato, que está teniendo una gran aceptación.
Recientemente hemos tenido la satisfacción de conocer en Santander a dos amigos con los que manteníamos contacto desde hacía tiempo, por teléfono y correo electrónico, pero que no habíamos tenido la oportunidad del trato personal. De un lado el capitán Javier Lamelas Olarán, santanderino de nacimiento, que pasó la mayor parte de su vida profesional en Compañía Trasmediterránea, en la que ejerció el mando durante mucho tiempo. Antes había estado en Compañía Trasatlántica Española, CAMPSA y en Ybarra Panamá.
De otro, el capitán José Luis Díaz Campa, miembro de la Sociedad Estatal de Salvamento, gijonés de nacimiento y cántabro de adopción, todo un referente en el sector. Miembro y directivo de la sección española de la World Ship Society, es un entusiasta del mundo marítimo y conocíamos especialmente su afán constante por la fotografía y el interés informativo del sector. Navegó en la Empresa Nacional Elcano y en la flota de buques cementeros asturianos.
Al visitar de nuevo Santander evocamos la memoria del extraordinario historiador naval Rafael González Echegaray, a quien conocimos un tiempo antes de su prematuro fallecimiento. De los navieros que forman parte de la historia marítima de la región y de España, caso de Antonio López, el fundador de Compañía Trasatlántica Española, nacido en Comillas; Fernando María de Pereda Aparicio y su entorno; y las familias Pérez-Maura y Pando, entre otros.
La estela de Carlos Casado Soto, director del Museo Marítimo del Cantábrico, que nos fue pronto, al truncarse su vida en un accidente de tráfico. De los capitanes, jefes de máquinas y oficiales de Cantabria que tanto han significado y significan en la Marina Mercante y en la Armada, además de la actividad de la construcción naval, desde el Real Astillero de Guarnizo a San Martín, luego Corcho, Basse-Sambre y Astilleros del Atlántico y la pujante realidad de Astilleros de Santander (Astander).
Javier Lamelas Olarán y José Luis Díaz Campa tienen muchas vivencias e historias a bordo para contar. Ambos tienen una memoria fértil extraordinaria y la precisión de los acontecimientos, pues les tocó vivir una etapa convulsa de la Marina Mercante española. Con ellos hemos departido en la señorial ciudad de Santander, a la que hacía demasiado tiempo que no visitábamos. Ha merecido la pena, sin duda, rememorar los años idos para siempre, pero el mayor valor de este encuentro ha sido, sin duda, rendir tributo a la amistad bien entendida.
Foto: Juan Carlos Díaz Lorenzo