En la mañana del 16 de septiembre de 1966 despegó del aeropuerto de Los Rodeos, en viaje a La Palma, un avión Douglas DC-3 de la compañía Spantax matrícula EC-ACX, que hacía el vuelo regular de la compañía Iberia IB-261, con 24 pasajeros a bordo y tres tripulantes. Habían transcurrido unos minutos de vuelo cuando una avería en un motor provocó un amerizaje en aguas de El Sauzal. El avión se hundió, llevándose consigo a uno de los pasajeros. Desde entonces, hace hoy 55 años, el pecio reposa en el fondo del mar. En el siguiente enlace, el lector podrá leer un relato amplio de aquel suceso, publicado el 16 de enero de 2005 en Diario de Avisos, decano de la prensa de Canarias.
Foto: Ecosubtenerife.com