Todo para la OPE 2024 y los restos para Canarias

Grupo Armas Trasmediterránea vuelve a apostar fuerte por la OPE 2024, sin tener la certeza de cómo le puede salir el presupuesto teniendo como tiene varios frentes abiertos. De un lado, en Alborán, la competencia de Balearia y GNV —fiel a su propósito temporal de destruir todo intento comercial que encuentra a su paso— y en el Estrecho, esta vez con unos contendientes mucho más experimentados en el negocio marítimo de desplazamientos temporales de masas, caso de DFDS como nuevo propietario de FRS Iberia y Stena como socio de AML.

Tiene, además, un frente doliente abierto en Melilla, de difícil solución cuando el daño ya está hecho. Algunas cabezas pensantes en Madrid han hecho gala de un innecesario desprecio a la Ciudad, pese a las muchas advertencias recibidas en otro tiempo por algunos expertos. Aunque haya impugnado el contrato con el Estado, Balearia le ha ganado definitivamente la partida y una parte de la sociedad de Melilla le ha dado la espalda. El ahorro mal entendido tiene esas cosas. No deja de ser menos cierto que la compañía tiene que buscar la rentabilidad del buque “Ciudad A. Melilla” —ahora “Fortuny”—, pero se ha equivocado en las formas, y las formas son importantes. ¿Qué va a hacer cuando termine la OPE? ¿Volverá a renombrarlo “Ciudad A. Melilla”, volverá a la línea del melillero o ya lo tiene en venta?.

Con un barco menos en su flota tras la venta del ferry “Las Palmas de Gran Canaria”, el grueso de la OPE 2024 del Grupo Armas Trasmediterránea vuelve a estar a cargo de los “volcanes” de Naviera Armas, incluido el comodín “Volcán de Tauce”. Dentro de unos días, el ferry “Volcán de Tamadaba” dejará Canarias y subirá a Alborán para cubrir la línea Almería-Nador, en compañía del renombrado “Fortuny”. A los de Madrid —y alguno afincado en Las Palmas— les interesa más la OPE que prestar un mejor servicio en Canarias, donde el emblema de Naviera Armas todavía tiene peso, como sucede en las islas de Lanzarote y Fuerteventura, que son destinos turísticos de primer nivel en Canarias y de una gran demanda en verano.

En lo que a la flota de Trasmediterránea se refiere, la compañía tiene un serio problema de vejez, que se acentúa con la nueva normativa europea y los costes de los programas de mantenimiento. En manos de los actuales gestores —y eso que ya no está Kent Hagbarth, autor intelectual y ejecutor del progresivo desmantelamiento de los servicios de la compañía—, no hay planes de renovación, pese a que los números vayan mejor. Es decir, no solo no habrá nuevas construcciones, sino tampoco adquisiciones o fletamentos razonables de segunda mano. Y en el caso de la flota de Naviera Armas, aunque algo más nueva, también va sumando años y ello tiene sus consecuencias.

De modo que, en ese impetuoso afán de apostar todo a nada a cuenta de la ruleta de la OPE —si los resultados de 2024 son parecidos a los de 2023, será lo comido por lo servido—, los servicios de Canarias del Grupo Armas Trasmediterránea se resienten, un año más, con una programación que penaliza claramente a las islas orientales y llena de incertidumbre el futuro a corto plazo de la línea de La Palma, a la que en su progresiva agonía, renueva el balón de oxígeno semana a semana, como se puede ver en la página web. Vayamos por partes.

Vuelve a Canarias el veterano “Al Andalus Express” para hacer durante el verano la línea Las Palmas-Puerto del Rosario y sube a la OPE el ferry “Volcán de Tamadaba”, con lo cual el ferry “Ciudad de Ibiza” pasará a cubrir la línea Las Palmas-Arrecife y si ya hubo jaleo y críticas el año pasado, este verano habrá más de lo mismo. En el caso del buque “Al Andalus” falta por saber si, como en la línea Algeciras-Tánger, llevará también pasajeros, lo cual parece probable. Sería bueno que quienes toman esas decisiones en Madrid viajen a bordo no un día, sino dos, tres, cuatro o una semana seguida sin bajar a tierra para que valoren mejor determinadas decisiones y vaya por delante todo nuestro respeto y aprecio a las tripulaciones.

Lo único que de momento les ha salido bien en el sector oriental de Canarias es la línea Playa Blanca-Puerto del Rosario, con el catamarán “Villa de Agaete”. Por las noticias que tenemos, la ocupación y la aceptación por parte del público y los transportistas va mejor de lo esperado y si no fuera porque el ferry “Volcán de Tindaya” tiene que volver a la línea para la que fue diseñado y construido, igual se planteaban otra estrategia, en la que cabría la posibilidad de venderlo.

En el sector occidental, salvando el excelente “puente marítimo” entre ambas capitales, con unos catamaranes realmente excepcionales —la última gran decisión de Antonio Armas—, en el resto de las líneas, excepto La Gomera, pintan bastos. Recortada de lunes a viernes por cuestiones de ocupación, costes y ausencia de una política comercial efectiva dictada desde Madrid, la línea de Morro Jable tiene el atractivo de que sale de Santa Cruz de Tenerife y no hay que hacer transbordo en Las Palmas de Gran Canaria, pero salvo los fines de semana de gran afluencia, no parece que tenga mucho recorrido, excepto que haya un cambio de estrategia y poco se puede esperar.

Está por ver si finalmente el Grupo Armas Trasmediterránea revalida el contrato con El Hierro. Fred. Olsen tiene interés, pero el interés que ha mostrado inicialmente no convence, si mantiene, como pretende, hacer la línea vía La Gomera. Pero cuidado, porque los adalides de los noruegos hoy piensan y dicen una cosa y mañana hacen otra. La línea de carga rodada con Fuerteventura y Lanzarote está recién iniciada y aunque la ocupación todavía es baja y tiene un barco caro de explotación, los comerciales están haciendo su trabajo arañando a los clientes que en otro tiempo había fidelizado el equipo de Antonio Armas.

Con La Palma, el servicio de pasaje está en manos de Fred. Olsen desde hace bastante tiempo, entre otras razones porque lo hace muy bien y porque la alta velocidad siempre gana. Este tema merece un análisis más amplio y así lo haremos. Se mantiene la incertidumbre respecto del ferry “Volcán de Taburiente”, que sigue recibiendo visitas de inspectores de compañías interesadas y tiene a su tripulación en vilo. Es un buen barco y comodín en cualquier línea, pero poco más se sabe. De momento. No parece que suba a la OPE, como se había dicho y si no se vende a corto plazo —lo cual entra dentro de lo probable—, igual lo vemos en otra línea o quien sabe si amarrado.

No está claro que hará finalmente el Grupo Armas Trasmediterránea con la línea de La Palma, donde tiene otro complicado frente abierto y ha conseguido enfrentarse al Cabildo, cuyo presidente, Sergio Rodríguez, hace lo que tiene que hacer: defender los intereses de su Isla. El transporte de la carga rodada desde Santa Cruz de Tenerife dos veces en semana, como pretenden desde Madrid, no resuelve el abastecimiento que demanda La Palma y eso ha puesto en guardia a los transportistas y a los empresarios, no solo por la manifiesta merma del servicio que supone hacerlo desde Los Cristianos sino porque temen las consecuencias del monopolio cuando solo quede Fred. Olsen.

Bien es verdad que los horarios del ferry “Volcán de Taburiente” son poco atractivos haciendo la línea directa con Los Cristianos. Dudamos de que exista una política comercial efectiva que trate de revertir la situación e insistimos en lo mismo: es bueno escuchar y preguntar a los que saben. A los de dentro y a los de fuera. Pero no lo hacen. Sería deseable que algunos directivos de Madrid estuviesen a bordo unos cuantos días seguidos y se levantaran a las dos de la madrugada en el sur o en el norte de La Palma para embarcar dos horas después y así es posible que entiendan mejor el estado de la cuestión. Como contrapunto, los plataneros han revalidado su confianza por otros cuatro años, lo que pone de manifiesto tanto la importancia como la capacidad de transporte y cumplimiento semanal de las dos escalas que conectan con Cádiz, lo que es todo un referente para el sector.

Y, por último, unas pinceladas a la línea Cádiz-Canarias. Cerrada la etapa de la línea de Huelva, que en su día abrió Naviera Armas y en la que irrumpió Balearia con el resguardo de poderosos (y jaquecosos) clientes de carga rodada, lo cierto es que cada vez ha ido a más, a costa en parte de la capacidad del Grupo Armas Trasmediterránea y con un servicio que este verano duplicará su capacidad.

Hubo, por tanto, que buscar reubicación para el ferry “Volcán de Tinamar” en la línea de Cádiz, en la que, de momento, parece que los números no cuadran como debieran, pero debe ser cuestión de tiempo y de trabajar más y mejor. La idea de la línea rápida con solo tres escalas es buena si ello estuviera acompañado de una política comercial y de servicios a bordo atractiva, de modo que consiga restar protagonismo y peso específico a la línea de la competencia en Huelva. Algo que está por ver, entre otras razones porque la estrategia de la competencia dista mucho de la constreñida posición en la que navega el Grupo Armas Trasmediterránea.

Sujeto al contrato con el Estado está el ferry “Ciudad de Valencia”, que es un buen barco, pero sería mejor barco si estuviera en manos de una tripulación española. La línea —y el resto de las líneas— se vendería mejor si la página web del Grupo Armas Trasmediterránea funcionara como lo hace la competencia, con intuición, agilidad y facilidad. Pero esas son cualidades que parecen negadas a los gestores de los bonistas y sus interesados fichajes de marketing, pues pese a los cambios recientes, y las advertencias de los que saben y tienen largo recorrido en la empresa, sigue siendo una web problemática y complicada. Y es que no aprenden.

Foto: Naviera Armas