De nuevo Tenerife Shipyards lidera el motor de las reparaciones navales en Tenerife. La idea de disponer de un dique flotante de menor capacidad en el puerto de Granadilla ha sido sustituida por una plataforma tipo syncrolift con una capacidad de varada de 20.000 toneladas para buques de 230 m de eslora y 42 m de manga y ocho carriles en tierra. Así lo indica Mario Suárez, director de Desarrollo Estratégico de Tenerife Shipyards, en unas declaraciones que hoy publica Diario de Avisos, decano de la prensa de Canarias.
La decisión de Tenerife Shipyards llega en un momento crucial para decidir el cierre de la zona de ribera del puerto de Granadilla, en el que se había planteado la posibilidad de hacer uno o dos diques secos, como única alternativa viable para sacarle provecho al controvertido espacio portuario, en el que se ha invertido mucho dinero con muy escaso rendimiento.
Finalmente, Tenerife Shipyards, que ha conseguido superar la crisis financiera del coronavirus, se ha decidido a dar el paso adelante y echa mano de la experiencia del syncrolift, una plataforma de elevación de patente estadounidense, bastante extendida en el mundo, de las cuales la primera fuera de EE.UU. se instaló en la antigua NUVASA. Ese es el mismo sistema de varada que tiene ASTICAN y Navantia Cartagena.
Si los intereses ocultos que atenazan el desarrollo del puerto tinerfeño más los enemigos que su promotora tiene en Gran Canaria no lo impiden, con este gran proyecto de Tenerife Shipyards –una empresa cien por cien canaria, filial del Grupo Hidramar– nacerá una nueva gran etapa que generará empleo de calidad y actividad económica, con una actividad especializada que ya tiene cartera para empezar con sus clientes en el sector off shore internacional, con sede en EE.UU. y Noruega.
Hemos de recordar que en el pasado, cuando se planteó el proyecto de DIATLANSA y anteriormente otro de iniciativa foránea, ya se ocuparon ciertos poderes fácticos de obstaculizar cualquier avance. Caso del todopoderoso INI del tardofranquismo, que veía un competidor peligroso para el astillero de Cádiz y acabó fortaleciendo la posición de ASVASA a favor de ASTICAN en detrimento, siempre, de los intereses de Tenerife.
Foto: Tenerife Shipyards