Ciento sesenta euros ida y vuelta, 80 por cada trayecto, es el precio total del billete en la línea Tenerife Norte-La Palma-Tenerife Norte en Binter, la principal aerolínea de Canarias, del cual, aplicado el 75% de descuento de residente canario, queda en unos 20 euros por cada tramo. Dicha tarifa se refiere a la disponible para compra inmediata en la oficina del aeropuerto.
Ello nos puede dar una idea de cómo la bonificación, que ha catapultado la ocupación en algo más de un millón de pasajeros, está generando paralelamente grandes beneficios y los precios se mantienen, en la práctica, en el mismo nivel que antes del acuerdo político auspiciado por la estrategia del partido de Román Rodríguez.
De modo que, en el ejemplo de la línea que nos ocupa, el pasajero paga unos 40 euros ida y vuelta por su billete, pero la liquidación final con el Ministerio de Fomento, a cuenta de la residencia, es de unos 160 euros, aproximadamente, de los que unos 120 euros salen de las arcas públicas vía impuestos. Considerando los elevados coeficientes de ocupación y una etapa media de 30 minutos, el transporte aéreo en Canarias, que es de vital importancia, es un negocio extraordinario.
Foto: Alberto Pérez Fernández