El buque metanero español “Adriano Knutsen” ha realizado su primera descarga de gas natural licuado en la terminal de Enagás, en el puerto de Barcelona, a donde arribó procedente de Qatar. Culmina así su primer viaje comercial, tras su reciente entrega en el astillero Hyundai Heavy Industries (HHI, Corea del Sur) y ahora se dirige a la bahía de Algeciras.
Construido por encargo de Knutsen OAS Shipping, una de las navieras más representativas del sector, el citado buque utiliza tecnología GTT Mark III Flex y ha sido inscrito en la matrícula naval de Santa Cruz de Tenerife. Se trata de un metanero de tercera generación, de 300 m de eslora, 48 m de manga y capacidad para el transporte de 180.000 metros cúbicos, equipado con un sistema de relicuefacción total a bordo para la reutilización del gas evaporado (boil off gas).
Dice Endesa que es la primera vez que opta por un contrato de fletamento por tiempo a largo plazo para el transporte de importación de gas natural licuado (GNL), pues hasta ahora había comprado en condiciones CIF. Endesa cerró en 2014 la compra de dos millones de metros cúbicos anuales de gas natural para los próximos veinte años del proyecto que Cheniere Energy tiene en Corpus Christi, en Texas (EE.UU.).
A principios de 2018, Knutsen encargó la construcción de un primer buque metanero para su transporte, que ha sido fletado por siete años, con posibilidad de otro tanto. Con ello cubrirá en parte las necesidades de transporte marítimo de gas natural de los próximos años, tanto Endesa como su matriz italiana Enel.
El importe del contrato de fletamento es de unos 25 millones de dólares anuales y el coste de construcción del buque asciende a unos 185 millones de dólares.Cada año, este buque metanero podrá realizar hasta doce viajes trasatlánticos o seis transpacíficos, desde la terminal de Corpus Christi. La velocidad contractual es de 19,5 nudos.
Fotos: Francisco Figueroa Ouréns