“Playa de Las Nieves” (1969-1985), homenaje a Agaete

A la segunda fase del plan de flota de Naviera de Canarias pertenecen tres buques frigoríficos que fueron en su momento el canto del cisne de la Marina mercante española en este tipo de unidades, junto a los que tenía en servicio Naviera Vizcaína y los de nueva construcción contratados por Naviera Lagos y Naviera Pinillos. NAVICASA tenía entonces en servicio tres buques de menor porte construidos en el astillero de la Sociedad Española de Construcción Naval en Sestao –“Playa de Las Canteras”, “Playa de Maspalomas” y “Playa del Médano”– y decidió ampliar su flota con otros tres buques de 172.000 pies cúbicos de capacidad cada uno.
La construcción del primero de ellos se contrató con el astillero de La Naval y recibió el nombre de “Playa de Las Nieves”, en homenaje a la playa del puerto homónimo situado en el municipio de Agaete (Gran Canaria), muy cerca del emplazamiento del Dedo de Dios, singular formación rocosa basáltica quebrada en noviembre de 2005, mientras que los dos siguientes, nombrados “Playa de Naos” y “Playa Blanca” –de los que ya nos hemos ocupado–, tomaron forma en las gradas de ASTANO, en Ferrol.
La construcción número 149 del astillero de La Naval de Sestao tomó forma en apenas ocho meses, lo cual nos aproxima al elevado rendimiento industrial de la citada factoría. Puesta la quilla el 13 de marzo de 1967, el 25 de mayo siguiente se procedió a su botadura, ceremonia en la que actuó de madrina la señora Elena Machado del Castillo. Ese mismo día, en ASTANO, se celebró la botadura simultánea de los buques “Lago San Mauricio”, para Naviera Lagos y “Carmen M. de Pinillos”, para Naviera Pinillos. En noviembre siguiente se procedió a su entrega oficial, después de efectuar las pruebas de mar, en las que alcanzó una velocidad de 19,5 nudos, que eran 2,5 nudos por encima de la velocidad contractual.
A su estreno, el buque “Playa de Las Nieves” realizó un viaje a Argentina para cargar 1.400 toneladas de carga congelada con destino a Barcelona, haciendo escala tanto a la ida como al regreso en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria. Luego se incorporó a la línea frutera entre Canarias, Rotterdam y Dieppe y al igual que el resto de los buques que componían la flota de Naviera de Canarias, hizo viajes en tráficos internacionales que le llevaron a recorrer diversos puertos de África y Sudamérica.
En 1978, cuando Naviera de Canarias había emprendido su ocaso, los buques “Playa de Las Nieves” y “Playa de Naos” fueron vendidos a la compañía argentina Antártida Pesquera Industrial SACIF, con sede en Ushuaia, Tierra del Fuego, siendo renombrados “Río Grande” y “Ushuaia”, respectivamente. En 1983, debido a la bancarrota de la citada compañía armadora, ambos buques quedaron amarrados en el puerto de Buenos Aires. Allí se encontraban cuando en 1999 fueron remolcados hasta San Pedro, en aguas del río Paraná, donde en 2001 causaron baja en el registro mercante argentino, aunque no tenemos noticias de que hayan sido desguazados.
De 2.622 toneladas brutas y 3.702 toneladas de peso muerto, medía 110 m de eslora total, 15,30 m de manga, 9,28 m de puntal y 6,45 m de calado máximo. Estaba propulsado por un motor Burmeister & Wain 7-50VT2BF-110 –fabricado en los talleres de la Sociedad española de Construcción Naval en Sestao–, con una potencia de 5.400 caballos sobe un eje y mantenía una velocidad de 17,5 nudos, aunque en pruebas de mar alcanzó 19,5 nudos. Código IMO 6277480.
Estaba compartimentado en cuatro bodegas asistidas por tres grúas y puntales para la bodega de proa, con una capacidad de carga de 172.000 pies cúbicos. Las tres bodegas situadas a proa del mamparo de la sala de máquinas tenían dos entrepuentes y en total disponía de siete espacios térmicamente independientes en cada uno de los cuales se podía mantener una temperatura diferente, de acuerdo con las exigencias de la carga. Podía alojar con gran comodidad a 12 pasajeros y 29 tripulantes.
Foto: Archivo de Alberto Mantilla. Nuestro agradecimiento