En estos días algunos medios se hacen eco del caluroso aplauso que los pasajeros de un avión A320 de Iberia Express le han dado al piloto de la aeronave, después de que se explayara a gusto respecto de las bondades del archipiélago canario. Suponemos que se trata del mismo que nos ha tocado en alguna ocasión en un vuelo entre Madrid y Tenerife Norte, en que se despachó durante unos veinte minutos hablando y hablando como si de un guía turístico o un locutor de radio se tratara, isla por isla, aunque con algún lapsus sobre La Gomera. Y es que hasta allí no llega Iberia Express.
Ciertamente hay pilotos a los que les gusta explicar detalles de la información operativa del vuelo y es algo que se agradece. Algunos van más allá e incluso sitúan a los pasajeros cuando se sobrevuela tal o cual ciudad. Con frecuencia también advierten de la posibilidad de que en la aproximación puedan producirse turbulencias y tranquilizan a los pasajeros de que no pasa nada, aunque pueda resultar incómodo. La mayoría agradecen como gesto de cortesía que se haya elegido la compañía en la que volamos y otros no dicen nada y obviamente están en su derecho.
Foto: Iberia Express