El mundo de la aviación

Pedro Agustín del Castillo vende sus acciones y sale de Binter

Que la familia Del Castillo haya puesto fin a su presencia en Binter, no es una cuestión anecdótica. Ni mucho menos. Cuando en junio del año pasado se dijo, convenientemente maquillado ante la opinión pública, que Pedro Agustín del Castillo dimitía de su relevante y mediático cargo en la presidencia de la aerolínea canaria, nos llamó mucho la atención, aunque también es cierto que su protagonista había manifestado tiempo atrás su deseo de ceder el paso y dedicarse a otras facetas de su notable actividad empresarial.  

Desde entonces, Rodolfo Núñez Ruano es el amo de Binter. Y decimos el amo, entre otras razones porque se trata del accionista mayoritario, todo lo lleva en primera persona con la anuencia del resto del consejo, que ha delegado en su capacidad y responsabilidad. Lo cierto es que lo que en diciembre pasado, muy sigilosamente, se ha producido lo que hoy ha publicado el periódico El Día en portada: la familia Del Castillo ha vendido sus acciones y sale del seno de Binter.

Con ello, el grupo grancanario inicialmente agrupado en aquella sociedad instrumental titulada Hesperia de Inversiones Aéreas, pierde peso específico en el control de Binter, que detenta mayoritariamente Rodolfo Núñez Ruano, quien ve colmada una de sus grandes aspiraciones personales, cuando en su día amenazó con su vuelta triunfal, como así sucedió y desembarcó con la guadaña bien afilada, con la que desde entonces no ha dejado títere con cabeza.

El 19,44% del capital social de Binter que detentaba la familia Del Castillo a través de Casticapital se ha repartido entre el resto de los accionistas. Hasta ahora la correlación de fuerzas en el seno de Binter era la siguiente: 50% controlado por Rodolfo Núñez, cuya cuantía, en un porcentaje del 49,81% corresponde al conglomerado Ilsamar Tenerife; Satocan Logística (10,45%), Germán Suárez Investments (10,11%) y Alfredo Morales, actual vicepresidente, representante de la entidad mercantil Flapa, un 10%.

Entre socios bien avenidos, parece ser que el reparto del paquete de la familia Del Castillo no ha generado sobresaltos y ha seguido las pautas reglamentarias. Pedro Agustín –todo un caballero en el trato y en las formas– y el grupo familiar que lidera ha permanecido 18 años en el seno de Binter, etapa en la que la aerolínea filial comprada al Grupo Iberia en poco más de 50 millones de euros ha conocido un crecimiento muy importante, no solo en el mercado regional sino en su proyección nacional e internacional, donde ha conseguido posicionarse con su propia identidad.

Foto: cedida

Anterior

2021: el gran año de los puertos de Latinoamérica

Siguiente

Aida Cruises y Tui esperan mejores tiempos en Tenerife