Navantia ha botado este domingo la tercera de las cinco corbetas que está construyendo en el astillero de San Fernando para la Marina Real de Arabia Saudí (RSNF), que lleva el nombre de “Hail” (numeral 832), en homenaje a esta ciudad del norte del país.
La botadura ha tenido lugar a las 16,15 h, momento optimo de la pleamar y a su entrada en el agua ha sido asistida en la maniobra por varios remolcadores de Boluda Towage con base en el puerto de Cádiz. Dado que la previsión meteorológica para los próximos días prevé fuertes vientos en la bahía gaditana, ha aconsejado cancelar la ceremonia que estaba prevista para este martes, 30 de marzo. De ahí que la botadura se haya realizado como un acto de trabajo del astillero.
La entrega de la nueva corbeta está prevista para diciembre de 2022. Durante la botadura se han escuchado los himnos de España y de Arabia Saudí.
La corbeta “Hail” es la tercera de las cinco que componen el programa Avante 2200. Mide 104 m de eslora y 14 m de manga y alcanzará una velocidad máxima de 27 nudos.
El diseño de las corbetas es de última generación, maximizando a la vez la participación de Navantia mediante la incorporación de productos propios, como el sistema de combate Catiz, sistema de comunicaciones integradas Hermesys, dirección de tiro Dorna, sistema integrado de control de plataforma y el puente integrado Minerva, junto con otros equipos desarrollados por Navantia bajo licencia, como los motores de MTU y cajas reductoras Renk
Este contrato, en vigor desde noviembre de 2018, fortalece el futuro inmediato de Navantia y beneficia a todos los astilleros de la compañía y a su industria auxiliar, en especial, a toda la Bahía de Cádiz.
Supone una carga de trabajo global de alrededor de siete millones de horas, es decir, seis mil empleos anualmente durante cinco años. De estos, más de 1.100 serán empleados directos en Navantia, más de 1.800 corresponden a la industria auxiliar y más de 3.000 son empleados indirectos generados por otros suministradores. Serán más de 100 las empresas auxiliares que colaboren en el programa.
El contrato, cuyo último buque deberá ser entregado en el año 2024, incluye, además de la construcción, el Apoyo al Ciclo de Vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales.
Por otro lado, también incluye el suministro de varios servicios, tales como apoyo logístico integrado, adiestramiento operacional y de mantenimiento, suministro de Centros de Formación y Adiestramiento para el Sistema de Combate y Sistema de Control de Plataforma de los buques, Apoyo al Ciclo de Vida y sistemas para el mantenimiento de los buques en la Base Naval de Jeddah.
Foto: Navantia