“Se constata el mecanismo estromboliano de la erupción, observándose un aumento de las fases efusivas frente a las explosivas, lo que está originando un mayor aporte de lava y menor expulsión de piroclastos y cenizas”, señala el informe diario del PEVOLCA. Según los expertos, la existencia de tubos lávicos y el hecho de que las coladas hayan aumentado en altura y se ensanchen ligeramente hace que el frente de estas apenas avancen.
Si no se producen nuevas desviaciones del recorrido de la lava, ni aumentan las concentraciones de gases, no está previsto, por el momento, realizar nuevas evacuaciones.
La portavoz del comité científico y directora del IGN en Canarias, María José Blanco, aclaró que en la tarde de ayer se reactivó un antiguo punto de emisión situado a unos 300 m al sureste de la base del cono principal, manifestando una actividad freatomagmática aunque solo con emisión de cenizas y no de lava. Los científicos que han visionado este centro “confirman que simplemente está emitiendo cenizas y ha disminuido su actividad”.
Se siguen monitorizando las coladas que se ubican al sur de la montaña de La Laguna. La colada que se encuentra más próxima a la montaña ha continuado evolucionando en dirección oeste y en estos momentos se sitúa a una distancia de unos 300 o 400 m del mar, con una velocidad de avance es más lenta que ayer.
En cuanto a la colada situada más al norte y de la que surgió un apéndice, Fernández indicó que ha continuado avanzando a un ritmo lento y destacó que desde el PEVOLCA se está realizando un seguimiento muy intenso en esta zona, ya evacuada, por ser la más activa en cuanto al avance de las coladas.
Respecto a la sismicidad, Blanco explicó que está mantenida a una profundidad situada entorno a 36–37 kilómetros y no hay datos que hagan pensar que vaya a cambiar esta tendencia y recalcó que existe una clara probabilidad de que en los próximos días se produzcan terremotos más sentidos por la población debido a su intensidad. “Ha alcanzado un techo de 4,6 de magnitud y una intensidad de V y esto puede ser superado en las próximas jornadas”, señala.
La portavoz del comité científico señaló que las condiciones meteorológicas actuales son desfavorables desde el punto de vista de calidad del aire, debido a la presencia de una inversión térmica acusada, el incremento de la suspensión de partículas inferiores a 10 micras (PM10) a causa de la presencia de polvo desértico como consecuencia de la entrada de una masa de aire de origen sahariano. Las previsiones apuntan a que esta situación se extienda durante las próximas 24–36 horas.
Ante un posible empeoramiento de estos valores, desde el PEVOLCA podrían adoptarse medidas puntuales de confinamiento de la población en el entorno de riesgo, como ya se ha hecho en otras ocasiones. Mientras tanto, dl director técnico insistió en que la población debe continuar utilizando las medidas de autoprotección prestando especial atención a los colectivos de población vulnerables, que deben permanecer el menor tiempo posible en el exterior.
En cuanto a las conexiones aéreas, Blanco agregó que la disposición actual y la prevista del penacho ha provocado la caída de cenizas en el aeropuerto de La Palma, afectando en su operatividad, en los días inmediatos. Además, es probable que la nube de cenizas pueda perjudicar al espacio aéreo comprendido entre La Palma, La Gomera y norte de Tenerife.
Por lo que se refiere a la superficie afectada por el proceso eruptivo, a día de hoy asciende a 724,41 hectáreas, 27,85 más que el día anterior. La anchura máxima es de 2.350 metros entre las coladas inferiores. Asimismo explicó que en cuando a los daños registrados en las infraestructuras, según el satélite Copernicus 1826 construcciones se encuentran destruidas y 97 dañadas parcialmente o en peligro, lo que hace un total de 1.923 edificaciones afectadas. Según los datos facilitados por el catastro, las construcciones afectadas ascienden a 1058, de las cuales 854 son de uso residencial.
Dictamen diario del comité científico
Del informe diario del comité científicos entresacamos lo siguiente:
«La erupción fisural continúa mostrando mecanismo estromboliano (esto es, un mecanismo de carácter mixto, con fases de explosividad que producen depósitos piroclásticos y fases efusivas que producen las coladas de lava, de forma simultánea), ahora con predominio de la fase efusiva. En volcanología la magnitud de las erupciones volcánicas se mide en la escala del Índice de Explosividad Volcánica (VEI por sus siglas en inglés) con valores entre 0 y 8; en el caso de esta erupción el VEI estimado hasta ahora es 2.
El flujo principal de las coladas de lava discurre por el flanco norte, bajando por la parte norte de las coladas previas, siguiendo trayectorias hacia el oeste y noroeste, dentro de la zona de exclusión actual. Actualmente uno de los frentes activos ha alcanzado la base de la Montaña La Laguna, bordeándola por el oeste. A la salida del centro de emisión el flujo se concentra en un canal lávico escalonado. Su taponamiento momentáneo y las oscilaciones del caudal lávico, originan desbordamientos puntuales que forman coladas efímeras que se derraman lateralmente sobre el cono principal. Siguen activos los centros de emisión del cráter. En la tarde de ayer se reactivó un antiguo punto de emisión a unos 300 m al SE de la base del cono principal, manifestando una actividad freatomagmática con emisión de cenizas. El comienzo de este evento fue simultáneo a una mayor actividad freatomagmática de los centros de emisión del cráter del cono principal que habitualmente muestran actividad estromboliana. Actualmente, el nuevo centro ha disminuido su actividad. No se descarta la aparición de nuevos centros de emisión en el entorno del cono principal, así como otros observables superficiales (emisiones visibles de gas) dentro de la zona de exclusión.
La morfología del cono cambia de manera reiterada por los sucesivos procesos de crecimiento y reconfiguración. El proceso eruptivo puede mostrar episodios de incremento y disminución de la actividad estromboliana, así como pulsos con actividad freatomagmática.
La altura de columna de cenizas y gases medida hoy, así como su dispersión, alcanza los 4.500 m.
Se prevé que continúe en altura (entre 1500 a 3000 m) el viento de componentes sur y oeste. La configuración del penacho de cenizas y SO2 se espera que continúe hacia el norte y nordeste durante las próximas horas (24-36 h). La disposición actual y la prevista del penacho provocan la caída de cenizas en el aeropuerto de La Palma, afectando a su operatividad. Además, es probable que la nube de cenizas pueda afectar a un estrato (alrededor del nivel de vuelo 100) del espacio aéreo comprendido entre La Palma, La Gomera y norte de Tenerife. Las condiciones meteorológicas son desfavorables desde el punto de vista de calidad del aire debido a la presencia de una inversión térmica acusada (de unos 4-5 °C situada entre 300-500 m). El material particulado de hasta 10 micras (PM10) se verá incrementado a causa de la presencia de polvo desértico, como consecuencia de la entrada de la masa de aire sahariana.
La sismicidad continúa localizándose, principalmente, cercana a la sismicidad de los primeros días, a profundidades entre 10 y 15 km. Se registran también terremotos situados a profundidades superiores a 20 km, que en las últimas horas han incrementado su frecuencia y magnitud. Se mantienen los valores altos de la amplitud de la señal de tremor, con pulsos de intensificación. La magnitud máxima observada ha sido 4.6 mbLg de un evento a 37 km de profundidad, y la intensidad máxima de V EMS también de un evento profundo. El nivel de sismicidad actual sigue indicando que es posible que se produzcan más sismos sentidos, pudiendo originar pequeños derrumbes en zonas de pendiente. La elevada sismicidad registrada a profundidades intermedias y profundas, se enmarcan en el mismo proceso eruptivo actual. No se registra sismicidad superficial significativa.
La deformación local en la estación más cercana al centro eruptivo producida en los últimos días, ha revertido. El resto de las estaciones no muestran una deformación significativa.
Durante el día de ayer (15/10), la emisión de dióxido de azufre (SO2) asociado al penacho volcánico (emanaciones visibles de gases volcánicos) continúa registrando valores altos y acordes al proceso eruptivo, alcanzando valores de 2882 toneladas diarias (valor subestimado). Así mismo, la emisión difusa de dióxido de carbono (CO2), asociada a los 220 km2 de la dorsal volcánica de Cumbre Vieja (emanaciones no visibles de gases volcánicos), ha sido estimada en 1.224 toneladas diarias a fecha de 15/10. La emisión difusa de CO2 en la estación geoquímica de Los Llanos (LP10) refleja una mayor fracción magmática-hidrotermal que la observada en la estación geoquímica de Fuencaliente (LP08). Todas estas observaciones geoquímicas son coherentes con el actual proceso eruptivo.
Respecto a la calidad del aire, durante la madrugada y primeras horas de la mañana de ayer se midieron valores altos de dióxido de azufre (SO2), que no llegaron en ningún caso a superar el umbral horario (establecido en 350 μg/m³), en las estaciones de Los Llanos, El Paso, Tazacorte y Puntagorda. Esos valores se fueron reduciendo a lo largo del día hasta valores bajos, volviendo a ascender en las estaciones de Puntagorda y Fuencaliente durante la noche hasta alcanzar valores cercanos al umbral horario, aunque sin llegar a rebasarlo”.
Fotos: Francisco Jiménez Acosta y Facundo Cabrera para puentedemando.com