Los dos últimos buques de altura y de nueva construcción de CAMPSA fueron los petroleros «Camponubla» y «Campeón» (2º). El primero de ellos se fue de la mar para siempre con el nombre de «River Jamaima», después de 32 años de vida marinera y fue desguazado en Alang (India), a donde arribó el 14 de marzo de 2011. Sobrevivió en casi cinco años a su gemelo, que acabó desmantelado en Chittagong (Bangla Desh) en junio de 2006.
Recordamos a ambos buques y, sobre todo, al primero –al que visitamos en alguna ocasión gracias al oficial radioelectrónico Barrientos– en sus frecuentes escalas en el puerto de Santa Cruz de Tenerife durante los años en que enarbolaron las contraseñas de CAMPSA [1] y de CLH. La primera escala del buque-tanque «Camponubla» en el puerto tinerfeño se produjo el 14 de agosto de 1979, en la ocasión de su viaje inaugural y aquí cargó para Santander.
Del mismo modo que también recordamos a quien fue su primer capitán, Manuel Sendra Navarro, lo mismo que a Blas López Archivel, primer capitán del buque «Campeón», siempre gracias al buen quehacer de quien fue durante muchos años consignatario de CAMPSA en Santa Cruz de Tenerife, Óscar Molowny.
Estos buques fueron los últimos exponentes del protagonismo naval de la Compañía Arrendataria del Monopolio de Petróleos (CAMPSA) y con ellos se ha ido de la mar para siempre un capítulo de nuestra historia marítima. En sus últimos tiempos, cuando la Compañía Logística de Hidrocarburos ya estaba abocada a su desaparición, el último barco en mantener la contraseña de CLH fue el petrolero «Alcudia,» comprado a REPSOL.
Siendo unos barcos relativamente grandes para el tamaño que operaba CAMPSA, no fueron, sin embargo los mayores. Dicho hito corresponde, en eslora (209 m) a los buques «Campeador» y «Campomayor» [2], construidos en los astilleros de la Sociedad Española de Construcción Naval, Cádiz y puestos en servicio en agosto y noviembre de 1969.
Sin embargo, en cuanto a peso muerto, los más grandes fueron los buques «Calvo Sotelo» [3] y «Campodola» (36.520 TPM), construidos en los astilleros de la Empresa Nacional Bazán, Ferrol y puestos en servicio en agosto de 1976 y abril de 1977, respectivamente. Cuando llegó el momento de decidir el nombre de los nuevos buques, el duque de Cádiz, Alfonso de Borbón, que era miembro del consejo de administración de CAMPSA, sugirió que se nombrase al primero de los nuevos buques en memoria de José Calvo Sotelo, ministro de Hacienda y fundador del Monopolio, muerto en trágicas circunstancias en julio de 1936, lo que así se decidió por unanimidad, dejando el nombre de «Camponubla» para un futuro buque.
Los citados petroleros medían 207,62 m de eslora total y ganaban a los anteriores en unas mil toneladas de peso muerto. El motor propulsor era parecido: Burmeister & Wain, de 13.800 caballos y 14.600 caballos de potencia, respectivamente. Por medio hubo dos petroleros comprados de segunda mano, en noviembre y diciembre de 1973, a la Empresa Nacional Elcano de la Marina Mercante, que recibieron los nuevos nombres de «Campanar» (ex «Compostilla») y «Campazas» (ex «Ribagorzana»), de 20.590 TPM.
Eran buques del tipo T del Plan de Nuevas Construcciones –los últimos de la serie, por cierto–, puestos en servicio en septiembre de 1959 y agosto de 1960. Elcano tenía comprometida la exportación de estos buques a un armador liberiano, pero se recibieron “órdenes de la superioridad” y fueron vendidos a CAMPSA, traspasando a ésta también la mayoría del personal.
El incremento en el consumo nacional de fuel-oil determinó la necesidad de construir dos nuevos buques, cuyo contrato se adjudicó a Astilleros Españoles y tomaron forma en el dique seco de AESA en Puerto Real (Cádiz), siendo las construcciones números 16 y 17 de la citada factoría y entraron en servicio en el segundo semestre de 1979.
De 14.862 toneladas brutas, 7.433 toneladas netas y 22.227 toneladas de peso muerto, medían 166 m de eslora total –156 m de eslora entre perpendiculares-, 24,24 m de manga, 12,60 m de puntal y 9,32 m de calado máximo. Cada uno cargaba 23.098 metros cúbicos en 11 tanques y estaban propulsados por un motor Sulzer 6RND68, dos tiempos, simple efecto, de 9.900 caballos de potencia sobre un eje y mantenían una velocidad de 14 nudos.
Eran unos barcos de líneas marineras agraciadas –como todos los de la flota de altura de CAMPSA– y con el sello inconfundible del diseño naval de los buques construidos en el astillero de AESA en Puerto Real, en el que líneas del casco, la superestructura, la grúa situada a popa y la chimenea constituyen un claro referente.
Así como la vida marinera del petrolero «Camponubla» transcurrió apacible, no así la de su gemelo «Campeón». El 15 de agosto de 1980, después de haber cargado gasoil y keroseno en la terminal del puerto de Sines, se produjo un incendio de grandes proporciones seguido de una serie de explosiones, resultando tres tripulantes fallecidos y cinco técnicos de la refinería heridos de diversa consideración.
El combustible que había cargado el buque-tanque «Campeón» fue trasvasado a la instalación de Sines y el resto al petrolero «Camporrojo». El buque siniestrado se dirigió a Cádiz por sus propios medios, donde se realizaron las reparaciones, que consistieron en cortar el casco a mitad de la eslora para reconstruir la sección de proa, que había resultado destruida por la explosión. En julio de 1981 entró de nuevo en servicio. Por lo publicado, de la investigación del accidente no se depuraron suficientemente las responsabilidades y respecto de los tripulantes fallecidos, algunos de sus familiares aseguran que jamás se les ayudó por la desaparición de sus seres queridos.
En octubre de 2004, los buques «Camponubla» y «Campeón» fueron vendidos a Marítima de Panamá, una sociedad del naviero valenciano Vicente Boluda controlada por la compañía Boluda Fos, y abanderados en el registro de aquel país con los nuevos nombres de «Guadalupe B» y «Margarita B», respectivamente. El primero de ellos fue vendido en 2007 a la sociedad Expedia Marine Co. Ltd. y renombrado «River Jamaima!, mientras que el segundo fue vendido para desguace.
El último barco de CAMPSA, Alcudia, procedente de la flota de REPSOL, fue vendido en 2005 [4]. De ese modo llegó el final de la flota de CAMPSA, que durante casi setenta años había sido un orgullo de la Marina mercante española.
Notas:
[1] El Monopolio de Petróleos se creó por real decreto-ley del Ministerio de Hacienda, de 28 de junio de 1927. La escritura de formalización del contrato de CAMPSA con el Estado fue otorgada el 18 de abril de 1928.
[2] El proyecto de estos buques se repitió en la construcción de otras siete unidades para la compañía Iraqi Maritime Transport Co. Cinco de ellos en Cádiz: «Kirkuk», «Ain Zalah», «Jambur», «Rumaila» y «Baba Gurgur»; y dos en Bilbao: «Khanakin» y «Buzurgan».
[3] El primer barco de CAMPSA de la posguerra recibió el nombre de «José Calvo Sotelo», entró en servicio en 1943 y permaneció en activo hasta 1976. CAMPSA tuvo otros cinco buques del mismo tipo: «Campante», «Campeón», «Campiz», «Campamento» y «Campanil». CEPSA contrató dos buques, de los que sólo recibió el primero, llamado «Bailén», mientras que el segundo –»Arapiles» sobre el proyecto-, pasó en plena autarquía a manos de la Empresa Nacional Elcano de la Marina Mercante y fue vendido en 1949 a PEMEX y renombrado «Pemex XIX» y «Presidente Miguel Alemán». En su viaje de entrega zarpó de Valencia tripulado por personal de Elcano e hizo escalas en Santa Cruz de Tenerife y La Habana, donde fue entregado a sus nuevos propietarios.
[4] El comprador fue Naviera Albatros y recibió el nuevo nombre de «Patricia A». Posteriormente fue vendido a Genesis Worldwide Shipping, de propiedad nigeriana, bandera de Panamá y renombrado «Ben K».
Bibliografía:
Díaz Lorenzo, Juan Carlos. Empresa Naviera Elcano. Seis décadas de historia. Madrid, 2004.
Díaz Lorenzo, Juan Carlos. La estela del petróleo. Santa Cruz de Tenerife, 2006.
Martínez Gil, Alfonso. Cincuentenario de la Flota del Monopolio de Petróleos (1927-1977). Madrid, 1977.
Fotos: Carlos Poveda, Juan Carlos Díaz Lorenzo y Jordi Montoro Fort
Petición: Nos gustaría saber quién es el autor de la foto del incendio del buque-tanque Campeón, para hacer constar su nombre. Gracias.