Se trata, en realidad, de una comunidad flotante de vecinos de gente rica en forma de barco. Se llama “The World” y después de haber hecho escala en Valencia y Lisboa, ahora se encuentra en el puerto de A Coruña y continuará viaje a Francia. A bordo, en esta oportunidad, 170 propietarios o inquilinos y 285 tripulantes. Como no es un crucero de turismo al uso, existe una programación anual en la que cada pasajero embarca y desembarca cuando lo desea.
El proyecto del buque obedece a un concepto de residencia flotante exclusiva, en el que todos sus propietarios, de unas 40 nacionalidades, lo son de 165 residencias de diferentes categorías: 106 apartamentos, 19 estudios apartamentos y 40 estudios, que miden entre 102 y 301 metros cuadrados. Puede albergar entre 150 y 300 huéspedes, incluidos invitados, que embarcan y/o desembarcan de acuerdo con sus intereses, como ya hemos señalado.
A precios de catálogo de 2015, una cabina Ocean Studio 661 sale por 600.000 dólares; una Ocean Residence 1006 por 2.950.000 dólares y una World Suite 1108/1110, por la módica cifra de 13,5 millones de dólares. Además, cada propietario aporta una cuota de comunidad mensual de 20.000 dólares para el mantenimiento del buque. La explotación está a cargo de una sociedad llamada ResidenSea II Ltd., con sede en Miramar (Florida, EE.UU.). Los copropietarios deciden la programación anual del barco, que se aleja del concepto tradicional de crucero de turismo.
El buque, abanderado en Bahamas, fue construido en el astillero de Landskrona (Suecia) y entró en servicio en 2002. Registra 43.188 toneladas brutas, 15.444 toneladas netas y 4.558 toneladas de peso muerto. Mide 196,35 m de eslora total -168,50 m de eslora entre perpendiculares-, 29,80 m de manga y 6,70 m de calado. Está propulsado por dos motores Wärtsila 12V32 sobre ejes independientes que le permite mantener una velocidad de crucero de 20 nudos. Código IMO 9219331.
Foto: José R. Montero