La rotura de una tubería de combustible en la sala de máquinas del buque “Caribbean Fantasy” provocó el incendio iniciado unas dos horas antes de que se diera la voz de alarma, según declaraciones de algunos tripulantes tras su evacuación y desembarco en el puerto de San Juan. Los pasajeros olían a humo y preguntaban qué sucedía y les contestaban que “todo está bajo control”, publica la prensa norteamericana.
Pero el incendio fue a más y llegó un momento en el que ya no lo pudieron ocultar, dadas las evidencias. Al menos 256 personas entre pasajeros y tripulantes han pasado por centros hospitalarios de la capital de Puerto Rico para reconocimiento médico, afectados en parte por golpes de calor, golpes sufridos y deshidratación, diez de los cuales permanecen hospitalizados.
Los pasajeros son en su mayoría dominicanos, entre los que se encuentran jóvenes deportistas en edad escolar que se dirigían a jugar competiciones en San Juan de Puerto Rico, entre ellos equipos de ciclistas, voleibol femenino y béisbol. El humo que salía por las chimeneas del barco fue avistado por cientos de personas desde tierra, quienes dieron la voz de alarma a las autoridades.
El buque siniestrado es un ferry de construcción japonesa, propiedad de Baja Ferries. En servicio desde 1989 y adaptado para viajes turísticos, sin embargo delata su origen la forma de su estructura y la rampa lateral que tiene situada en la amura de estribor. Anteriormente ha navegado con los nombres de “Victory” (1989-2008) y “Chihuahua Star” (2008-2011). De 27.372 toneladas brutas y 6.737 toneladas de peso muerto, mide 187 m de eslora, 28 m de manga y 6,70 m de calado. Código IMO 8814263.
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