En El Mundo de la Aviación nos hemos referido en diversas ocasiones a uno de los grandes protagonistas legendarios de la aviación comercial y, a nuestro entender, uno de los aviones más bonitos de la historia de la construcción aeronáutica: Lockheed L-1049G “Super Constellation”. Tiene, por derecho propio, un puesto de honor en la historia de la gran Iberia, pues con este avión la entonces compañía de bandera española cruzó en 1954 el Atlántico norte en su primer vuelo Madrid-Nueva York, convertido en uno de los grandes hitos de la época.
Según nuestros archivos, diez aviones Super Constellation volaron para Iberia entre junio de 1954 y abril de 1966, uno de ellos alquilado con matrícula norteamericana (N-7125). El que vemos en la foto, matrícula EC-AQN, es el penúltimo de los aviones propios. Bautizado “La Rábida”, llegó en marzo de 1961 y permaneció hasta 1966, siendo vendido unos meses después, ya en 1967, a Aerodybe. En la foto, además, podemos apreciar a uno de los aviones Convair CV-440 Metropolitan, aparcados ambos en 1964 en el aeropuerto Madrid-Barajas.
Foto: vía Carlos A. García Vega [Observando la Aviación]
5 comentarios
Una maravilla de la época en Perú. Líneas aéreas nacionales voló 4 de estos aviones.
De acuerdo sobre su apreciación de la belleza del super Constellation. Yo viajé de pequeño a Caracas en uno de estos aviones de Iberia, y desde entonces se me quedó grabado su diseño.
Negativo, no fue el Super Constellation 1049, fue el Constelation 749 (a secas) volado por LANSA, Líneas Aereas Nacionales S.A.
Pésimamente operados. Quebró después del accidente Lima-Cusco.
Le decía «el mejor trimotor del mundo», porque a menudo terminaba la travesía del Atlántico con algún motor apagado.
Tuvo un defecto de fabricación que provocaba que se levantara la cola, es decir, más ligera. Lo resolvieron invirtiendo el estabilizador horizontal.
Hubo una versión militar. Un bombardero operado por la USAF.