El primero submarino de la serie S-80 Plus será puesto a flote entre marzo y abril de 2021 y será el buque “Isaac Peral” (S-81), con el que la Armada rinde homenaje al oficial inventor del submarino de finales del siglo XIX. La pandemia del coronavirus y la incidencia que ello ha tenido en el desarrollo de los trabajos, ha obligado a reprogramar fechas, lo que implica un aplazamiento de seis meses, informa el digital especializado infodefensa.com.
En diciembre de 2019 se completó el cierre del casco resistente del S-81 y entonces se programó la puesta a flote –en el astillero de Cartagena no hay botadura– para octubre de 2020. Pero la crisis del coronavirus ha trastocado los planes y ahora se baraja entre marzo o abril de 2021. Algo más del 70% del personal de Navantia y de las firmas auxiliares que participan en el programa han vuelto al trabajo, cifra que se estima en unos dos mil operarios.
El programa del submarino S-80, iniciado en 2005, ha conocido multitud de vicisitudes en el transcurso de su desarrollo, entre ellos un problema de sobrepeso, que se ha resuelto con el alargamiento del casco en 10 m de eslora. Según el citado digital especialista en Defensa, el coste ronda los 3.900 millones de euros, frente a los 2.135 millones iniciales, después de que en 2018 el Gobierno autorizase un aumento de 1.771 millones adicionales.
La previsión antes de la pandemia del coronavirus era que el submarino “Isaac Peral” (S-81) fuera entregado en septiembre de 2022. El segundo, nombrado “Narciso Monturiol” (S-82), en mayo de 2024. El tercero, “Cosme García” (S-83), en marzo de 2026 y el cuarto, “Mateo García de los Reyes” (S-84), en julio de 2027. Parece razonable que, como resultado de las circunstancias, habrá que sumarle como mínimo un retraso de seis meses.
Foto: Navantia