Tuvimos el honor y el privilegio de compartir grandes momentos profesionales y personales con el capitán Servando Peraza García, comodoro de la flota de Fred. Olsen. Siempre atento, amable y con una vocación de servicio sin límites. Profundo en conocimientos, muy amplio en experiencia, líder indiscutible, representante digno y honesto, maestro de una generación de buenos profesionales, padre y esposo de magisterio fecundo y amigo entrañable de días felices.
La noticia de su partida hacia la singladura eterna tal día como hoy, el 19 de mayo de 2015, nos rompió el alma. Y entonces como ahora evocamos su memoria fértil con la gratitud y el afecto que siempre nos profesamos y el reconocimiento bien merecido. Le seguimos echando de menos y nos invade con frecuencia el eco de su voz y su presencia con la generosidad de quien tanto dio y nunca pidió nada a cambio.
Foto: cedida