La fachada marítima de Santa Cruz de Tenerife (1934)

La calle de La Marina –que en la imagen aparece como calle capitán García Hernández, que así se denominó entre 1931 y 1936– conforma una parte de la fachada marítima de Santa Cruz de Tenerife, delimitada entre la alameda del duque de Santa Elena y la vieja muralla en el barrio de El Toscal. En su primer tramo lateral izquierdo de la fotografía destaca el edificio del Casino de Tenerife –proyecto del destacado arquitecto grancanario Miguel Martín Fernández de la Torre– y frente al lateral de la Alameda –de la que ya han desaparecido los arcos– aparece el kiosko de información turística del Cabildo Insular de Tenerife, cuyo cartel luminoso se encendió en agosto de 1933 (Hoy, 3 de agosto de 1933).
Aparece también la Casa Hamilton, sede del consulado británico, además de importante empresa comercial; le sigue la casa Forstall y la casona que hace esquina a la calle Emilio Calzadilla tuvo entre otros usos la residencia provisional del capitán general de Canarias, Intendencia Militar y Hotel Italiano.
En el tope de la Casa Ledesma, destacada empresa consignataria, ondea la bandera del consulado de la República de Finlandia y en el segundo tramo de la calle de La Marina apreciamos el edificio Núñez –proyecto del arquitecto José Blasco Robles–, terminado en 1934, con el anuncio del molino ya instalado –como apunta el profesor Agustín Pedro Miranda Armas– y enfrente, la interesante casa La Roche y el edificio del hotel Bahía. Los tres inmuebles citados, así como la casa Ledesma, se conservan en la actualidad.
La arboleda de la alameda del duque de Santa Elena marca el comienzo de la avenida de Anaga y del waterfront de la ciudad marinera de Santa Cruz de Tenerife –que con tanta enjundia ha estudiado el eminente profesor Alberto Darias Príncipe, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna–, en la que el mar bañaba entonces las playas de San Antonio y La Peñita y frente a ella aparece la bahía portuaria, en la que sestean las gabarras y embarcaciones auxiliares del puerto tinerfeño y vemos amarrada a la flota del cabotaje frutero, en una de sus periódicas crisis.

Fotos: Postal Express nº 32, archivo de Manuel Jesús Martín Martínez-Ball
5 Comentarios
Lastima que el fakeayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife no haya preferido poner estas preciosas fotos en los Yersey de los bares de la avenida anaga, en lugar de las «banderitas» de España… horroroso!!!! No por la bandera, o banderas, si no porque las banderas no son para eso…
Pués sí, que pongan imágenes de lo que fue en su día, una gran playa que no se supo conservar, desde La Alameda hasta Los Cañones…
Y no contentos con eso, la poca playa que quedaba se le regaló al Club Naútico y a Paso Alto, que a su vez hicieron unas construcciones «preciosas» que embellecieron la ciudad, que vergüenza más grande…
Hoy aún está la casa estrecha de tejado en pico que limita calle de La Marina y Avenida Francisco La Roche.Me lleva a recuerdo de» Los Llanos» donde iba a comer con mis padres, carretera de tierra, posterior a esta fecha y al bar «los paragüitas».Lo que era la muralla de piedra donde están los edificios múltiples.Ojalá se expusieran fotos de recuerdo de nuestro Santa Cruz en algún lugar.Me ha gustado mucho
Recuerdo de pequeño pasar por la calle y ver desde la parte alta de la baranda la Viña del loro, que épocas, y que ciudad teníamos que se veía el mar, la ciudad con su estampa marinera y la farola del mar, el que lo vivió lo disfrutó, las nuevas generaciones no están intereresadas en el antiguo Santa Cruz, todos van al nuevo, mejor así lo tendremos para los que lo conocíamos como era, aunque está muchísimo cambiado con respecto a lo que fue