El 6 de junio de 2010 arribó a Aliaga (Turquía) el buque cementero griego “Aeolis”, cuyo nombre figuraba pintado en la amura y en el espejo de popa, encima del que tuvo durante algunos años en letras de molde y placa soldada. En sus últimos años de vida marinera, pintado de color gris oscuro, enarboló bandera griega y la contraseña de la compañía Naftitan Maritime & Transportation, con sede en Atenas.
Sobre cubierta tenía la instalación para las operaciones de un buque de su clase, pero poco había cambiado su estampa marinera que lo hacía fácilmente reconocible: “Enebro”, primero de los tres buques portacontenedores frigoríficos de la compañía española Marítima Comercial Exportadora, S.A. (MACOESA), un proyecto naviero efímero. Los otros dos recibieron los nombres de “Jaral” y “Romeral” y los tres estaban en servicio en 1978, estrenándose en el transporte de la zafra frutera de frutas y hortalizas de Canarias a Inglaterra.
Poco duró la ilusión. En la zafra de 1979-1980, los barcos de Macoesa quedaron fuera de las subastas correspondientes en y comenzaron los apuros que derivaron en el cese de operaciones. Se apuntó, entonces, a “la presión ejercida por parte de Fred. Olsen Lines ante la comisión interprovincial de transporte de las asociaciones de exportadores canarios, a través de uno de sus más destacados miembros, en el sentido de que la naviera española no siguiera transportando frutas y hortalizas a Inglaterra. Según el inspector de flota de Macoesa, Luis Carballo Calero, esta posición de la Fred. Olsen responde a cuestiones de carácter competitivo desde el punto de vista técnico, al estar mejor dotada la flota de la compañía española que la noruega, y por otro lado, a las ofertas hechas en concepto de fletes netos por parte de Macoesa y que están fijados en 47 peniques de precio, mientras la noruega ofertó 50 peniques”.[1]
Los barcos fueron intervenidos por el Banco de Crédito Industrial (BCI) y controlados mientras tanto por la Sociedad de Gestión de Buques (SGB). Durante algún tiempo estuvieron fletados por Naviera del Odiel y en tráficos “tramp”, pero sin que tuvieran perspectivas de futuro.
En 1989, el buque “Enebro” fue adquirido por Líneas Marítimas Hespérides y, renombrado “Isla de La Palma” navegó entre Canarias y el Sur de la Península en el tráfico de contenedores. En abril de 1991 lo compró la citada compañía Naftitan Maritime & Transportation, siendo posteriormente transformado en buque cementero dotado de doble casco en la sección de carga.
Por lo que se refiere a los otros buques de la serie, “Jaral” y “Romeral”, fueron adquiridos por Naviera Pinillos durante la presidencia de Alberto Herrera Hernández y en 1989 recibieron los nombres de “Ter” y “Turia”. A pesar de ser unos barcos incómodos, estrechos y con unas pronunciadas escoras, realizaron una apreciable labor gracias al buen quehacer de sus tripulaciones. Permanecieron al servicio de la citada compañía hasta 1997 y 1996, respectivamente, en que fueron revendidos a otros armadores, poco antes de que Vicente Boluda se hiciera con el control de la centenaria empresa. Del destino de estos buques nos ocuparemos en una próxima crónica.
El buque “Enebro”, o “Isla de La Palma” si se prefiere, era la construcción número 94 de Astilleros de Huelva, iniciada sobre grada el 28 de diciembre de 1976, botado el 22 de julio de 1977 y entregado el 1 de marzo de 1978. De 1.598 toneladas brutas, 1.075 toneladas netas y 2.619 toneladas de peso muerto, medía 83,22 m de eslora total –75,65 m de eslora entre perpendiculares–, 13,21 m de manga, 6,30 m de puntal y 5,11 m de calado. En cuando a capacidades, en bodega podía cargar 2.093 metros cúbicos de grano o 154 TEUS. Estaba propulsado por un motor MWM TBD501-6, de 2.475 caballos de potencia sobre un eje y mantenía 14,5 nudos de velocidad. Código IMO 7614525.
Nota:
[1] El País, 11 de agosto de 1979.
Foto: Juan Carlos Díaz Lorenzo