Una vez al año, el buque “Royal Clipper” hace escala en el puerto de Santa Cruz de Tenerife. Se trata de un barco de turismo que tiene forma de velero de cinco palos, cuya construcción está inspirada en el histórico velero alemán “Preussen”, de comienzos del siglo XX. A las 21 h se hizo de nuevo a la mar rumbo a Bridgetown, en el mismo recorrido que hace un año.
Diseño del arquitecto naval Zygmunt Choren, el buque actual es el resultado de un casco de acero inacabado y construido en el astillero de Gdansk (Polonia) y completado en el astillero Merwede en julio de 2000. Propiedad de la sociedad Star Clippers, está abanderado en Malta -antes lo estuvo en Luxemburgo- y dedicado a viajes de turismo muy selectos, con el aliciente de que se trata del velero más grande del mundo.
Registra 5.000 toneladas brutas y son sus principales dimensiones 134,80 m de eslora total, 16,50 m de manga y 5,60 m de calado. En cinco palos despliega 42 velas con una superficie vélica de 5.202 metros cuadrados, cuyo izado y arriado se controla por ordenador. Es un espectáculo verlo con el aparejo desplegado, como sucede con todos los veleros. Dispone, asimismo, de dos motores Caterpillar y tiene capacidad para 227 pasajeros y 117 tripulantes.
Foto: Nelson Bourne