Treinta y seis oficiales radioelectrónicos de la Marina Mercante, la mayoría radicados en Galicia, en cuya Escuela Oficial cursaron sus estudios, se dieron cita el pasado fin de semana en el Casino de A Coruña, para celebrar su almuerzo anual de hermandad. Una profesión que conoció el tránsito rápido de la radiotelegrafía a la radioelectrónica y que cumple con una misión muy importante a bordo. Una oportunidad magnífica para la evocación de los años idos para siempre y de la amistad imperecedera.
Foto: José R. Montero