Hubo un tiempo, medido en años, en el que la isla de La Palma, al igual que las otras islas productoras de Canarias, exportaba plátanos para los mercados europeos, principalmente Inglaterra, Francia y el norte de Europa. Cuando acabó la Segunda Guerra Mundial reaparecieron las navieras que hacían ese tráfico y aparecieron otras nuevas, como la sueca Gorthon Line, que cargaba para Suecia y Finlandia, dos destinos que sabían apreciar muy bien la calidad del plátano de Canarias.
En la foto tomada en el puerto de Santa Cruz de La Palma vemos al buque “Inga Gorthon”, que atendió la línea frutera por espacio de algo más de una década, desde comienzos de los años cincuenta. Gorthon Line estaba presente en el tráfico de Canarias desde finales de los años cuarenta y fue un digno representante de las navieras del norte de Europa, en unión de Svea Line, también sueca; la danesa DFDS y Fred. Olsen & Co., aunque ésta última lo estaba desde antes de la guerra.
Construcción número 338 del astillero Kockums Mekaniska Verkstad Ab, factoría de Malmoe (Suecia), el 14 de junio de 1951 resbaló por la grada y entró en servicio el 26 de octubre siguiente registrado a nombre de Rederi Ab Gylfe, una de las sociedades de Gorthon Line, con sede en la ciudad de Helsingborg. Comenzó entonces la etapa en la que se vinculó con los puertos de Santa Cruz de La Palma, Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria.
De 1.959 toneladas brutas, 917 toneladas netas y 3.450 toneladas de peso muerto, medía 98,13 m de eslora total, 13,75 m de manga y 8,51 m de puntal. Estaba compartimentado en cuatro bodegas y propulsado por un motor MAN de 2.250 caballos, que le permitía mantener una velocidad de 14 nudos. Era un barco bonito, el típico “tres islas” de la época, con el puente hecho en madera. Código IMO 5516089.
En febrero de 1966 sufrió un incendio cuando se encontraba en el puerto de Helsinborg y tras su extinción y reconocimiento de daños, se procedió a su reconstrucción en el astillero de Landskrona. En octubre de aquel año, cuando otras unidades de nueva construcción habían tomado el relevo, se vendió a la compañía griega Blue Diamond Marine Co., con sede en El Pireo y pasó a llamarse “Alpha”.
De nuevo el fuego volvió a ser protagonista en su vida marinera. En febrero de 1967 se declaró un incendio cuando iba de Port Sudan a Bremen y entró de arribada forzosa en el puerto de Cartagena con la bodega número 1 en llamas. Viendo el alcance del siniestro, se decidió remolcarlo fuera del puerto y permaneció a unas ocho millas al oeste hasta que, consumido por el fuego, se consiguió vararlo unos días después, produciéndose el colapso de la superestructura y declarado pérdida total.
Foto: Historia de La Palma / Maximiliano Fernández Gil (facebook)