Nos recuerda Carlos Salazar en su página de facebook que estas imágenes del aeropuerto de Moscú corresponden a principios de los años sesenta, en plena guerra fría y en ellas aparece el avión Tupolev Tu-104, primer reactor fabricado en la URSS. El documento gráfico tiene su interés puesto que en aquella época las fotos en las dependencias civiles y militares estaban rigurosamente prohibidas. Resulta interesante, asimismo, reconocer los modelos de los vehículos de alta gama que entonces circulaban por la capital soviética.
El avión Tupolev Tu-104 seguía el diseño del proyecto británico De Havilland Comet y consumía mucho combustible, de modo que para un vuelo Moscú-Madrid tenía que repostar en Luxemburgo. Y como apunta Fernando Llorente, el ruido de los motores era ensordecedor, por lo que a los pasajeros se les suministraba unos tapones de algodón, para amortiguar su impacto. Alcanzaba una velocidad máxima de 950 km/h, tenía un alcance de 2.650 kilómetros con un peso máximo de 110 toneladas y un techo de servicio de 39.000 pies.
Fotos: Archivo de Carlos Salazar