“Su vida, instantáneamente quebrada en un desgraciado accidente, que nos hurtó la cálida y acogedora presencia de su persona, deja sin embargo la huella imborrable de un ejemplo a seguir. Y en la materialidad física de esta placa, que materializa su recuerdo, su nombre será acariciado a perpetuidad por la brisa del Cantábrico, el mar en el que rindió como marino sus primeras singladuras y en cuya orilla, al socaire de estos diques, descansará ya para siempre su memoria”.
Así se refirió Ramón Alvargonzález, director de la Fundación Alvargonzález y portavoz de la familia en el acto celebrado este jueves en la inauguración del muelle del puerto de El Musel que lleva el nombre de Romualdo Alvargonzález Figaredo, fallecido en trágicas circunstancias el pasado 31 de diciembre, informa la edición digital del periódico La Nueva España.
Una ceremonia emotiva organizada por la Autoridad Portuaria de Gijón a la que asistieron familiares, diversas autoridades, empresarios y amigos cercanos. El descubrimiento de esta placa, instalada en un monolito, completa el reconocimiento que el puerto de Gijón ha querido rendir al insigne naviero asturiano, presidente del grupo Ership-Alvargonzález y de la Fundación Alvargonzález, además de cónsul de Finlandia en Asturias, entre otras responsabilidades.
Fotos: Juan Plaza / La Nueva España
