El Gobierno italiano ha salido a toda carrera en auxilio de la maltrecha Alitalia y ha ordenado una ayuda inicial en forma de préstamo de 600 millones de euros, para garantizar su operatividad durante los próximos seis meses. Con ello se trata de evitar la quiebra de la compañía, que se encuentra sumida en una grave crisis y en situación concursal controlada por un triunvirato técnico que tiene el encargo de preparar un plan industrial que garantice su continuidad.
El descalabro de Alitalia perjudicaría considerablemente la imagen de Italia, algo que el gobierno trata de evitar. La compañía tiene doce mil trabajadores y una flota de 121 aviones. El 49% del capital está en manos de la compañía árabe Etihad Airways y el 51% restante está gestionado por MIDCO, una sociedad participada en su totalidad por CAI, que es un consorcio formado por veinte empresarios italianos que acudieron en ayuda de la aerolínea en 2009. Entonces, como ahora, estaba al borde del precipicio y recibió una inyección de mil millones de euros.
Foto: Masakatsu Ukon