Esta mañana ha zarpado del puerto de Cádiz el gigayate “Azzam”, después de una estancia de siete meses. Según ha trascendido, tiene previsto dirigirse a la ría de Vigo para efectuar reparaciones y trabajos de mantenimiento a cargo de los talleres de la zona, aunque primero ha hecho escala en Gibraltar.
Su presencia, allá donde quiera que vaya, no pasa inadvertida. Según los medios especializados, es propiedad del actual emir de Emiratos Árabes Unidos (EUA), Jalifa bin Zayed Al Nahyan y se estima que invirtió algo más de 600 millones de dólares en su construcción.
Proyectado por Nauta Yatchs y diseñado en su interior de Christophe Leoni, este buque es uno de los hitos del astillero alemán Lürssen, cuya construcción estuvo supervisada por el ingeniero árabe Murabak Saad al Ahbadi y entró en servicio en 2003.
De 13.136 toneladas brutas y 1.381 toneladas de peso muerto, mide 180,60 m de eslora, 21,69 m de manga y 4,30 m de calado. Está propulsado por un sistema combinado formado por dos turbinas de gas y dos motores diésel con una potencia de 94.000 CV, que accionan cuatro water jets y le permite mantener una velocidad máxima de 32 nudos. Código IMO 9693367.
Foto: Juan Carlos Díaz Lorenzo