La foto que acompaña es bastante conocida en el ambiente carnavalero de Santa Cruz de Tenerife. Sucedió a finales de la década de los años sesenta. El coche que vemos está dentro de la fuente de la Plaza de la Paz –erigida en 1919 para conmemorar el final de la Primera Guerra Mundial, que tanto afectó a la economía frutera y a la sociedad de Canarias–, situada en la confluencia de la entonces Rambla del General Franco, Rambla de las Asuncionistas y la Rambla de Pulido, próxima al kiosko de la Plaza de la Paz y enfrente al cine Víctor. Lo curioso del caso es que es el resultado de una apuesta.
Sí, de una apuesta. Dos amigos regresaban a sus casas, de amanecida, subiendo en el vehículo que vemos en la imagen por la Rambla de Pulido. Surge la apuesta con el conductor de que no era capaz de meter el coche, de una vez, dentro de la fuente. Éste no repara en objeciones y acelera de tal modo que metió el coche de un solo intento con fuerte estruendo y ganó la apuesta. Lo que no sabemos es cuánto le costó la avería, la retirada y el arreglo del vehículo, más la consiguiente multa. “Cosas de carnavaleros”, apunta el estimado amigo Juan Antonio López Delgado, a cuyo archivo pertenece esta curiosa imagen.
Foto: Col. Foto Melián, archivo de Juan A. López Delgado