De nuevo en el puerto de Santa Cruz de Tenerife la gracia y la elegancia del buque-escuela “Sagres”, de la Marina de Portugal, en la primera escala del largo viaje conmemorativo del V centenario del viaje de vuelta al mundo de la expedición Magallanes-Elcano. A su llegada ha sido recibido por el nuevo cónsul de Portugal en Santa Cruz de Tenerife, Vicente Álvarez Gil, quien, en compañía del comandante del buque, capitán de fragata Antonio Manuel Mauricio Camilo y del agregado naval de la Embajada de Portugal en Madrid, capitán de navío Tomé Manuel Palhas Ezequiel, han cumplimentado esta mañana a las primeras autoridades de la provincia.
Protagonista de elegante estampa y densa historia marinera, el buque-escuela “Sagres” es el tercero con este nombre en la historia de la Marina portuguesa. Construido en los astilleros Blohm & Voss, en Hamburgo, el contrato entró en vigor el 2 de diciembre de 1936 y el 15 de junio de 1937 se puso en grada el primer bloque de su quilla. Apenas tres meses después, el 30 de octubre, el nuevo buque fue botado con el nombre de “Albert Leo Schlageter”.
El 12 de febrero de 1938 fue entregado a la Reichsmarine y el 20 de marzo siguiente zarpó en su primer viaje de instrucción, al mando del capitán de fragata Bernhard Rogge. Dos días después, cuando atravesaba el canal de la Mancha, colisionó cerrado en niebla con el buque inglés “Trojan Star”. Hasta el comienzo de la guerra, el buque “Albert Leo Schlageter” realizó varios viajes más, entre ellos dos navegaciones por el Atlántico Sur y durante la mayor parte de la guerra estuvo atracado en Kiel en funciones de formación.
En 1944, el mando naval alemán ordenó que este buque –comandante, capitán Joachim Asmus– hiciera un viaje de instrucción con jóvenes aprendices de marinería y se organizó un crucero por el Báltico, zona considerada relativamente segura para un barco de este tipo. Sin embargo, la experiencia resultó trágica: el barco chocó el 4 de noviembre con una mina en medio de un fuerte temporal provocando la muerte de 18 tripulantes. El velero aguantó bien el impacto debido a su construcción en compartimentos estancos y en su ayuda acudió su gemelo “Horst Wessel”, regresando ambos al puerto de partida.
Poco antes del final de la guerra y después de haber sido reparado, el buque “Albert Leo Schalagater” –comandante, capitán de corbeta Johann Reckoff- fue llevado a Flensburg, decisión que evitó su pérdida, pues unos días después la ciudad de Kiel, incluida su base naval y los barcos que en ella se encontraban, resultaron totalmente destruidos por los bombardeos de la aviación inglesa.
Es el tercero de una serie de cuatro buques gemelos construidos para la Marina de Guerra alemana: “Gorch Fock” (1933), más tarde “Tovarisch” (1952-2003) y “Horst Wessel” (1936), actual “Eagle” del United States Coast Guard. El cuarto buque, que iba a llamarse “Herbert Norkus”, no llegó a construirse debido al comienzo del conflicto armado.
Sin embargo, parte del aparejo de este último sobrevivió a la guerra y sería utilizado en la construcción del nuevo “Gorch Fock” (1958), que es una repetición del proyecto original. En 1938, el citado astillero finalizó la construcción de otro buque de la misma serie, llamado “Mircea”, para la Marina de Rumanía. De la serie es el único gemelo del primer “Gorch Fock”, pues los dos restantes tienen siete metros más de eslora.
El origen del primero de los buques de esta serie está en el naufragio de la brickbarca de cuatro palos “Niobe”, buque-escuela de la Kriegsmarine ocurrido el 26 de julio de 1932 en aguas del Báltico, con un trágico saldo de 69 muertos, motivó la decisión de la Marina de Guerra alemana de disponer de un nuevo buque para la formación de sus futuros oficiales.
La construcción del primer “Gorch Fock” comenzó el 2 de diciembre de 1932 y cien días después fue botado con dicho nombre, en honor del escritor Johann Kinau, que utilizaba dicho pseudónimo en su producción literaria y había fallecido en 1916 a bordo del crucero “Wiesbaden”, en la batalla de Jutlandia. El 26 de junio de 1933 causó alta en la lista oficial de buques alemanes. Cuando acabó la Segunda Guerra Mundial y con Alemania derrotada, los buques “Albert Leo Schlagater” y “Horst Wessel” fueron incautados por EE.UU. en compensación de daños, del mismo modo que otros veleros –caso del primer “Gorch Fock”, “Padua” y “Kommodore Johnsen”– y varios buques mercantes pasaron a la URSS e Inglaterra.
El buque “Albert Leo Schalagater” se encontraba atracado en Bremerhaven y pese a los intentos para que se hiciera cargo del mismo una fundación en EE.UU., a comienzos de 1948 fue vendido a la Marina de Guerra de Brasil en un precio simbólico de 5.000 dólares, para compensar las pérdidas de buques habidas durante la contienda. En el momento de su entrega el barco carecía de elementos básicos para la navegación, por lo que fue remolcado hasta su nuevo país, a donde arribó después de un mes de viaje.
Completado con piezas canibalizadas de otros buques de la Marina de Guerra brasileña, en octubre del citado año enarboló el pabellón brasileño rebautizado con el nuevo nombre de “Guanabara”, siendo su primer comandante el capitán de fragata Pedro Paulo de Araújo Suzano. El barco hizo frecuentes viajes de instrucción por la costa brasileña y el único puerto extranjero que visitó fue Montevideo (Uruguay) en 1949. Diez años después, el 21 de julio de 1959, el buque-escuela “Guanabara” concluyó su servicio a la Marina de Guerra brasileña y el 30 de noviembre de 1960 causó baja en la lista oficial de buques militares de aquel país.
A comienzos de los años sesenta, la Armada de Portugal proyectaba sustituir al segundo “Sagres”, ex “Rickmer Rickmers” –capturado en 1916 en las Azores y buque-escuela desde 1924– y en 1961, a instancias del ministro de la Presidencia, Pedro Teotónio Pereira, negoció la adquisición del buque “Guanabara” en un precio de 150.000 dólares, firmándose el contrato de compra-venta el 10 de octubre del citado año en Río de Janeiro.
El 30 de enero de 1962, el buque-escuela “Sagres” causó alta en la Armada de Portugal y en la misma fecha el segundo “Sagres” fue clasificado como buque depósito flotante y rebautizado “Santo André”. El 8 de febrero siguiente se enarboló a bordo por primera vez el pabellón portugués y tomó el mando el capitán-teniente Henrique Afonso da Silva Horta, que había sido, precisamente, el último comandante del anterior “Sagres”.
El 25 de abril de 1962 zarpó de Río de Janeiro en viaje a Lisboa, a donde arribó el 23 de junio siguiente, después de haber hecho escalas en Recife, Mindelo (Cabo Verde) y Funchal. Desde entonces el buque realiza viajes anuales de instrucción, excepto entre 1987 y 1991, en que fue sometido a obras de gran carena. Destacan tres viajes de vuelta al mundo realizados en 1978-1979, 1983-1984 y 2010, así como otros cinco viajes con una duración de cinco meses, caso de la Gran Regata Colón 92, la conmemoración de los 450 años de la llegada de los portugueses a Japón en 1993 y del quinto centenario de la llegada a Brasil, en 2000.
Desde entonces se ha convertido en el mejor embajador de Portugal allá donde quiera que haya estado y de su estampa marinera, cuando navega con todo el aparejo, destaca la cruz de Cristo roja, utilizada en los navíos portugueses desde el siglo XV, a modo de símbolo de la Orden Militar de Cristo, de la que el infante don Henrique fue gobernante desde 1420 y cuya efigie simboliza el mascarón de proa.
De 1.536 toneladas standard y 1.940 toneladas de desplazamiento a plena carga, mide 89,50 m de eslora total –70 m de eslora entre perpendiculares–, 12 m de manga, 7,55 m de puntal y 5,50 m de calado. La altura de quilla a perilla es de 45,50 m. Apareja de brickbarca de tres palos y despliega una superficie vélica de 1.971 metros cuadrados. Con todo el trapo largo y en excepcionales condiciones de viento ha alcanzado una velocidad máxima de 16,5 nudos.
Para las maniobras y tiempos de calma chicha dispone de un motor MTU acoplado a una reductora que acciona una hélice de paso fijo y le permite mantener una velocidad de 9 nudos. Su autonomía es de 5.450 millas a velocidad económica de 7,5 nudos. Puede alojar a 139 oficiales, suboficiales y marinería, así como a 63 cadetes, de ellos 12 mujeres. Su actual comandante es el capitán de fragata Luis Nuno da Cunha Sardinha Monteiro, en el mando desde mayo de 2011.
Conviene recordar que el primer “Sagres” fue una corbeta de casco de madera construida en 1858 en los astilleros de Limehouse, en Inglaterra. Cumplió con la misión formativa de marinería entre 1882 y 1898, fondeada en aguas del río Duero, a su paso por Oporto.
El promontorio de Sagres es una referencia geográfica situada al suroeste de Portugal, en la región del Algarve. Conocido por los romanos como Promontorium Sacrum, se encuentra en una posición dominante rodeada de escarpados acantilados constantemente batidos por el viento. Allí existe una fortaleza del siglo XV, que es monumento nacional desde 1910.

Fotos: Sergio Hernández de León y Perdomo