A finales de 1977 la Marina Mercante de Cuba se sumó a la lista de países que disponían de un buque-escuela para la formación de sus futuros oficiales egresados de la Escuela Naval de El Mariel. Inscrito en la matrícula naval de La Habana, recibió el nombre de “José Martí”, apóstol de la Independencia y durante su existencia enalteció el orgullo nacional y fortaleció el prestigio cubano en el exterior. Tuvimos ocasión de visitarlo en alguna de sus escalas en el puerto de Santa Cruz de Tenerife y ciertamente nos causó una grata impresión por su organización y cometido, pulcritud y la amplitud de sus espacios.
“La dama blanca del socialismo cubano” era un proyecto danés del que se construyeron dos buques similares. Uno para Iraq, llamado “Ibn Khaldoon” (IMO 7700491), entregado en agosto de 1978 y destruido en 2003 durante la guerra y el que nos ocupa, que formó parte de la flota de la Empresa de Navegación Mambisa y ambos figuraban entre los más modernos de su época.
Construcción número 412 del astillero Helsingor Skibsvaerft og Maskinbyggeri A/S (Dinamarca), el 23 de agosto de 1976 se puso en grada el primer bloque de su quilla y el 4 de marzo de 1977 resbaló por la grada con el ceremonial acostumbrado. En septiembre siguiente realizó las pruebas de mar, en las que alcanzó una velocidad máxima de 18 nudos. Disponía de acomodación para 63 tripulantes y 355 alumnos y profesores. En su primer viaje, bajo el mando del capitán Orlando Rodríguez Romay –que entonces tenía 25 años– y el jefe de máquinas Fausto Sardinas Lostal, el buque “José Martí” zarpó de Helsingor e hizo escalas en Rotterdam, Amberes y Ceuta antes de cruzar el Atlántico rumbo a La Habana, a donde arribó en olor de multitud.
Barco caro para su época –costó unos 42 millones de dólares–, estaba proyectado como aula navegante y buque de carga general en cuatro bodegas y 152 contenedores, cuya operativa en las operaciones de carga y/o descarga de ocho puntales y una grúa de cinco toneladas aprendían los alumnos de puente. Para su cometido formativo disponía de una derrota con equipos duplicados iguales a los del puente de mando, laboratorio de radioelectrónica, laboratorio de inglés con magnetófonos individuales y talleres para los alumnos de máquinas. La cocina estaba equipada con lavaplatos automático, lo que era una novedad para la época en un barco de bandera cubana.
Por espacio de trece años, impecablemente pintado de blanco, el buque-escuela “José Martí” se convirtió en uno de los emblemas de la revolución cubana. En su historial destaca un viaje efectuado a Jamaica en 1977 con motivo de una visita de Fidel Castro a aquel país, en el que la oficialidad de puente fue sustituida por oficiales militares. Sin embargo, cuando comenzó el declive de la Marina mercante cubana que conduciría a su práctica desaparición, en 1990 pasó a la propiedad de Meggi Naviera Unida y se renombró “Taíno”. Pintado de color verde siguió navegando a Europa y otros destinos y en sus últimos años permaneció amarrado en el puerto de La Habana empleado como oficinas y almacén de la Empresa de Navegación Mambisa.
Hasta 1996 conservó bandera cubana y en aquel año se renombró “Agate Islands”, siendo abanderado en St. Kitss & Nevis. En diciembre de 2004 se renombró “Agate Spirit” y en enero de 2006 recuperó el nombre de “Agate Islands”. En septiembre del citado año llegó remolcado al puerto de Recife camino del desguace en la India tras la estela de un remolcador de bandera panameña y tripulación ucraniana, aunque el 25 de febrero de 2007 se hundió cuando se encontraba en la posición 29º 55’ S y 32º 25’ E, a unas 75 millas al Este de Durban, por una vía de agua. Las imágenes del barco herido de muerte, escorado de popa a estribor en su último viaje hacia las profundidades del océano, provocan todavía un sentimiento de gran dolor y tristeza entre todos los marinos cubanos, sea cual sea su condición y credo político.
De 12.170 toneladas brutas, 6.176 toneladas netas y 13.021 toneladas de peso muerto, medía 149,10 m de eslora total –137 m de eslora entre perpendiculares–, 20,80 m de manga, 11,56 m de puntal y 9 m de calado máximo. La capacidad de carga de graneles era de 15.556 metros cúbicos y estaba propulsado por un motor Burmeister & Wain, con una potencia de 9.400 caballos sobre un eje, que le permitía mantener una velocidad de 16,5 nudos. Código IMO 7520188.



Fotos: FotoFlite, Carlos V. Goñiz Fariñas, Pieter Inpyn y Frank Mármol