El buque de investigación oceanográfica “Hespérides” (A33) ha comenzado la tercera fase de su despliegue en la Antártida. Durante este período participará en el proyecto científico Distantcom, que estudia los invertebrados del fondo marino y el potencial uso farmacológico procedente de este ecosistema, y apoyará el cierre de las bases antárticas españolas.
Hasta el momento el BIO “Hespérides” –comandante, capitán de fragata Julio Albadalejo López–, que desarrolla su XXI campaña antártica española, ha navegado unas 13.200 millas náuticas en 78 singladuras desde que zarpara el 6 de octubre de 2015 desde su base en Cartagena. El primer mes de la campaña lo empleó en realizar el tránsito a la Antártida y preparar sus próximas misiones.
La campaña antártica comenzó el 13 de diciembre, cuando salió con rumbo al continente helado desde Punta Arenas, tras embarcar en la ciudad chilena a científicos, técnicos y personal del Ejército de Tierra. En esta primera fase, durante los meses de diciembre y enero, el buque español se ha dedicado, además de desarrollar proyectos científicos a bordo, a apoyar a las bases antárticas españolas “Juan Carlos I” en la isla Livingstone y “Gabriel de Castilla” en la isla Decepción transportando material, víveres y combustibles y científicos que se encuentran llevando a cabo diferentes proyectos.
Durante el mes de diciembre se desarrolló a bordo el proyecto “Pharmadeep”, en el que se tomaron muestras de organismos a profundidades de hasta cinco mil metros. Se trata de estudiar a los organismos marinos que viven en condiciones extremas de presión y bajas temperaturas, que pueden ser fuentes únicas de productos naturales para el tratamiento de cáncer y enfermedades infecciosas, informa la Armada española.
En este proyecto, liderado por el doctor Alan Jamieson de la Universidad de Aberdeen (Reino Unido), se emplearon siete días tomando muestras realizando un gran número de maniobras para poner en el agua y enviar al fondo distintos tipos de equipos. Los días de Nochebuena y Navidad fueron jornadas de trabajo durante este proyecto, solo interrumpido momentáneamente para celebrar la cena y comida.
La segunda fase de la campaña antártica comenzó tras una escala en el puerto de Ushuaia (Argentina), del 30 de diciembre de 2015 al 3 de enero de 2016. Durante el mes de enero, además de seguir prestando apoyo a las bases, se desarrolló un nuevo proyecto a bordo, en este caso liderado por el Instituto Hidrográfico de la Marina.
Su objetivo fue efectuar mediciones del sistema de posicionamiento Galileo y continuar con los trabajos del proyecto cartográfico ya iniciados en zona antártica en años anteriores. Para ello, embarcó una comisión hidrográfica dirigida por el capitán de fragata Juan Conforto Sesto.
Durante la primera mitad de la campaña se han visitado además numerosas bases de otros países, como las argentinas “Primavera”, “Cámara” y “Decepción”; las chilenas de “Yelcho”, “Frei” y “Arturo Prat”, la búlgara de “St Kliment Ohridski” y la rusa de “Bellingshausen”.
La campaña antártica está coordinada por el Ministerio de Economía y Competitividad a través del Comité Polar Español. En ella toman parte el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, que gestiona la base antártica “Juan Carlos I” en la isla Livingstone; el Ejército de Tierra, que gestiona la base antártica “Gabriel de Castilla” en la isla Decepción; y la Armada, que opera el BIO “Hespérides”.
El BIO “Hespérides” es el único buque español diseñado para efectuar investigación científica multidisciplinar en todos los mares y océanos del planeta, lo que ha hecho posible el desarrollo de todas las investigaciones científicas planeadas. El buque tiene una dotación de 60 militares y puede alojar hasta 37 científicos y técnicos.