El 8 de julio de 1974 comenzó una nueva etapa en la historia de las comunicaciones marítimas de La Gomera, que se ha mantenido en el tiempo y se ha situado entre las de mayor importancia de todo el país. Se cumplen, por tanto, 48 años del primer viaje del ferry «Benchijigua», primero de su nombre, en la línea La Gomera-Los Cristianos. Una iniciativa de Fred. Olsen y destacados empresarios tinerfeños (Álvaro Rodríguez López-Braun, Cándido Luis García Sanjuán y Antonio Carballo Fernández) y el contralmirante Leopoldo Boado Endeiza, primer presidente del consejo de administración y nexo de unión con la Administración central.
El primer “Benchijigua”, construido en Noruega, llegó importado al amparo del REF de 1972 en el que tanto empeño había puesto el malogrado abogado tinerfeño Antonio Carballo Cotanda y tenía capacidad para 399 pasajeros y medio centenar de vehículos. El viaje duraba 90 minutos y el billete tenía un precio de 280 pesetas, un coche 500 pesetas y el novedoso buque realizaba tres salidas diarias desde cada puerto.
El capitán Miguel Ángel Sánchez Conejo fue el encargado de traerlo desde Noruega y realizó los primeros viajes, así como el jefe de máquinas José García Oliva, el tripulante más antiguo de Ferry Gomera, que viajó al astillero de Trondheim cuando el buque se encontraba aún en construcción. Lali Hernando, desde la oficina instalada en la Avenida de Anaga, fue la primera empleada encargada de atender al público de la recién estrenada compañía.
Como bien recuerda el estimado colega y amigo Marcos Brito, el lunes 8 de julio de 1974, a las once de la mañana, salió el ferry “Benchijigua” desde el puerto de Los Cristianos rumbo a San Sebastián de La Gomera. En este su primer viaje inaugural viajaron las primeras autoridades, entre las que se encontraban el gobernador civil de la provincia, Rafael González Echegaray; el gobernador militar, general Rafael Facerías; el presidente de la Mancomunidad de Cabildos, Rafael Clavijo García; además de una amplia representación del mundo empresarial y social. Llegado a La Gomera, y después de una actuación folklórica, se procedió a la bendición del buque, que estuvo a cargo del obispo de la Diócesis Nivariense, monseñor Luis Franco Cascón y actuó de madrina María Angélica Domingo, esposa del vicepresidente de la naviera, Álvaro Rodríguez-López Braun.
Cuarenta y ocho años después, el desarrollo conseguido durante casi cinco décadas ha sido espectacular. Lo saben muy bien los gomeros, tras las penurias que habían sufrido en el pasado reciente. La prolongación de la autopista del sur, como decía entonces Cándido Luis García-Sanjuán, ha catapultado el protagonismo de La Gomera hasta límites insospechados.
El trabajo de Per Tonsager, Tomás Cerdeña Brito, Julio Mosquera Valeiras, Rafael Marín Correa y Thor O. Lindberg –persona extraordinaria, que desempeñó además el cargo de cónsul de Noruega en Tenerife– y de quienes en cada puerto y a bordo formaban parte de Ferry Gomera, consolidó la posición que Fred. Olsen Express posee en la actualidad. Ferry Gomera era entonces una empresa cercana, amable, diríase entrañable, cuya cercanía atrajo la voluntad de sus clientes, que son quienes han asegurado su continuidad. La compañía tuvo, además, unos aliados notables, entre ellos el Grupo Gomero que formaba Adolfo Trujillo, Lorenzo Cabeza, Domingo León y José Miguel Noda.
Ferry Gomera –Líneas Fred Olsen a partir de 1994 y Fred. Olsen Express desde 1999– refleja el espíritu y el vínculo de Fred. Olsen con La Gomera. Una presencia que tiene algo más de un siglo, en la que figuran nombres destacados de la historia contemporánea de Canarias, como los hermanos Álvaro y Conrado Rodríguez López, la explotación agrícola de las fincas de Tecina y la actividad pesquera en Playa de Santiago.
Foto: archivo de José Luis Torregrosa García