Puede ser que la falta de información sobre la presencia de este tipo de aeronave, entre otras razones, haya contribuido a saltar la alarma en Galicia, cuando los vecinos de la desembocadura del río Miño han confundido la maniobra de un hidroavión ruso que se disponía a cargar agua, con un supuesto accidente de la aeronave. La noticia ha trascendido a nivel nacional y se han hecho eco en los telediarios.
Se trata, en realidad, de un hidroavión Beriev Be-200 propulsado por dos motores situados sobre las alas, un modelo poco visto en estas latitudes. Se encuentra operando en la zona como ayuda de Rusia a los incendios forestales que asolan a Portugal. Hace unos días, en un informativo de un canal nacional, la presentadora se refería a la maniobra de un avión Canadair CL-215 también como un supuesto accidente en el que “llegó a tocar el agua”. La cultura aeronáutica en este país todavía tiene un largo recorrido.
Foto: Dmitriy Pichugin