El puerto de Sidi Ifni marcó el inicio de la relación comercial de Antonio Armas Curbelo con la vecina costa africana. La construcción de un teleférico en aquella plaza, por entonces española, conocido también como “el bloque” [1], generó un tráfico muy preciso en el que se precisaba de importantes cantidades de materiales áridos –grava, arena, piedra, cal, cemento, etc.–, parte de los cuales se embarcaban en Puerto del Rosario y en el puerto de La Luz. Hasta entonces las operaciones de descarga de las mercancías se hacían por medio de vehículos anfibios de origen militar.
El primer barco de Antonio Armas Curbelo que tomó parte en aquel tráfico fue el buque “Medina Tanya” y, a continuación, aquello fue creciendo de tal modo que otras unidades de la flota también fueron destinadas para cubrir las necesidades del servicio y, entre ellos, el buque “Concepción Aparisi”, así como algunos motoveleros.
Este buque ocupa, por derecho propio, un puesto de honor en la historia de la flota de Antonio Armas. Fue adquirido en 1954 al armador valenciano Rafael Ortiz Fuset y marcó un hito en el proceso de consolidación y renovación de la naviera, pues con el buque “Rosita Soler” –que también fue adquirido en ese mismo año–, suponía el comienzo del relevo de los motoveleros por barcos de casco de acero y propulsión diésel y a vapor.
La construcción del buque “Concepción Aparisi” comenzó en octubre de 1951 en Astilleros Neptuno, de cuya factoría era la construcción número 8, propiedad de la sociedad mercantil colectiva Vaño, Lluch y Cía. y estaba entonces bajo la dirección del ingeniero naval Luis Neira Franco. Sobre el proyecto iba a llamarse “Amparo Comes”, pero estando en grada, en noviembre de 1952 recibió su nuevo nombre con el que habría de navegar el resto de su vida marinera. [2] El 13 de agosto de 1953, el buque “Concepción Aparisi” fue entregado a sus armadores, siendo destinado a tráficos de cabotaje y algunos viajes a la vecina costa africana.
En enero de 1954 –es decir, apenas seis meses después de su puesta en servicio–, pasó a engrosar la flota de Antonio Armas Curbelo y antes de incorporarse al tráfico interinsular, estuvo navegando durante seis meses por puertos de la península, bajo el mando del capitán Antonio Sivera Pascual, tiempo más tarde práctico del puerto de Arrecife de Lanzarote. El 24 de julio del citado año arribó, en su primera escala, al puerto de La Luz y Las Palmas y en septiembre siguiente descargó en Arrecife 115 toneladas de azúcar en sacos “de inmejorable calidad” [3] procedente de La Habana (Cuba), cuyo transbordo se había efectuado en el puerto de Las Palmas.
En aguas de Sidi-Ifni encontró el buque “Concepción Aparisi” el final de su vida marinera, Sucedió en la madrugada del 9 de febrero de 1959 cuando estaba fondeado cuando se levantó un ventarrón que reventó la cadena del ancla y la máquina no pudo arrancar a tiempo, por lo que el barco derivó de popa y embarrancó, causándole dos vías de agua.[4] Hubo varios intentos para sacarlo de aquella comprometida situación y, entre tanto, Antonio Armas Curbelo lo vendió a la Agencia Marítima Medina, de Las Palmas, que prosiguió los trabajos para su reflotamiento, aunque con la mala suerte de que el casco volcó sobre la banda de estribor. Así permaneció tiempo y más tarde pudo ser adrizado, pero no llegó a realizarse el salvamento, por lo que allí quedó abandonado para siempre.
De 299 toneladas brutas, 176 toneladas netas y 410 toneladas de peso muerto, medía 35,56 m de eslora total –33,14 m de eslora entre perpendiculares–. 7,55 m de manga, 3,31 m de puntal y 2,90 m de calado. Inscrito en la matrícula naval de Valencia, estaba propulsado por un motor diésel Yeregui, de 250 caballos de potencia y andaba 8,5 nudos con buen tiempo.
Notas:
[1] El sistema portuario de Sidi Ifni era único en el mundo. Medía 1.522 m de largo con un apoyo intermedio a 459 m del dique y otro en tierra al borde del acantilado. Fue proyectado por el ingeniero Vicente Caffarena Aceña y estaba formado por unos grandes bloques construidos en Las Palmas y remolcados hasta su emplazamiento como puntos de apoyo para el tendido del teleférico y carros autopropulsados con una potencia de 260 caballos. Una plataforma colgante debajo del carro se utilizaba para transportar 10 toneladas métricas de mercancías y pasajeros. Las obras se adjudicaron en diciembre de 1955 y el teleférico fue inaugurado en 1966. En la actualidad se encuentra en estado de abandono.
[2] Díaz Lorenzo, Juan Carlos (1995). Antonio Armas. La tradición de un naviero. pp. 87-89. Naviera Armas. Las Palmas de Gran Canaria.
[3] Antena, 7 de septiembre de 1954.
[4] Antena, 10 de febrero de 1959. ABC, 10 de febrero de 1959.
Fotos: archivo de Juan Carlos Díaz Lorenzo e ifniville.com.