Cuatro tripulantes muertos y un quinto desaparecido es el trágico balance provisional del incendio ocurrido a bordo del buque car carrier “Sincerity Ace”, que se inició el pasado 31 de diciembre cuando se encontraba a unas 1.800 millas al noroeste de Hawai. El citado buque, con 21 tripulantes a bordo, zarpó el 26 de diciembre de Yokohama en viaje a Honolulú, a donde tenía previsto llegar ayer, con un envío de 3.500 vehículos de la marca Nissan.
Desde que se conoció la situación, informada por el capitán del buque siniestrado, el U.S. Coast Guard activó el sistema de alerta AMVER y cinco barcos acudieron en su ayuda, consiguiendo rescatar a 16 tripulantes. Según lo informado, los otros cinco acabaron en el agua debido a algún problema en el lanzamiento de la balsa salvavidas. Cuatro han sido localizados flotando y la búsqueda del quinto se ha suspendido, mientras el buque sigue ardiendo a la deriva.
Las imágenes captadas por los aviones del U.S. Coast Guard muestran graves daños estructurales. El buque “Sincery Ace”, construido en 2009 y abanderado en Panamá, tiene una capacidad para 6.400 coches y es propiedad de la compañía Shoei Kisen Kaisha, aunque está fletado a Mitsui OSK Lines. Hasta el momento se desconocen las causas que originaron el incendio.
Foto: U.S. Coast Guard / canal Khon 2 (Hawai)