En 1954, año en el que la gran Iberia incorporó su primer avión cuatrimotor Lockheed L-1049C Super Constellation, la dinámica del mercado requería de nuevas estrategias, por lo que la compañía tuvo que afrontar un asunto novedoso, al que hasta entonces había prestado poca atención: la publicidad. Iberia contrató los servicios de la firma publicitaria y de relaciones públicas James Seix Co. para desarrollar una campaña de introducción en el mercado norteamericano, que costó 25.000 dólares.
Una de las primeras recomendaciones de la mencionada agencia fue la del cambio de nombre, entonces Iberia, Líneas Aéreas Españolas, que traducido al inglés era Iberia Spanish Airlines –lo que en EE.UU. no se asociaba con nuestro país–, por el de Iberia, Líneas Aéreas de España, es decir, Iberia Airlines of Spain en inglés. Y así sucedió y se mantuvo durante mucho tiempo, como identificativo de la que fue compañía de bandera.
Foto: Archivo de Juan Carlos Díaz Lorenzo