En una crónica anterior nos habíamos referido al lago Saimaa, que es el mayor de Finlandia. Volvemos a hacerlo ahora para ocuparnos de los canales militares Suvorov, llamados así en recuerdo del general Alexander Suvorov, que fue quien ordenó su construcción. Se trata de cuatro canales abiertos llamados Kutvele, Käyhkää, Kukonharju y Telataipale y se encuentran en Puumala, Ruokolahti y Sulkava, respectivamente. Fueron construidos entre 1791 y 798 como parte del sistema de fortificación sudoriental de Finlandia y son los más antiguos del país.
Después de la guerra ruso-sueca (1741-1743), Suecia cedió la fortaleza de Lappeenranta y el castillo Olavinlinna, en Savonlinna, al Imperio Ruso mediante el Tratado de Åbo. El lago Saimaa se dividió en dos, controlando Suecia el estrecho de Puumala y exigiendo pagos de peaje fluvial entre Savonlinna y Lappeenranta e impidiendo el tráfico militar.
Cuando acabó la guerra, Rusia realizó mejoras en las defensas con la construcción de un sistema de fortificación en la región sur-este de Finlandia. La guerra también había mostrado la importancia de las vías de agua del lago Saimaa, por lo que, como parte del sistema de fortificación, se decidió la construcción de una serie de canales para eludir el paso por Puumala.
La construcción de los canales Kutvele, Käyhkää y Telataipale comenzó en el otoño de 1791, bajo la dirección del ingeniero Ivan Laube, mientras que la del canal de Kukonharju arrancó en 1794. Los canales Kukonharju y Kutvele se terminaron en 1796 y los de Käyhkää y Telataipale en 1798.
Están construidos en piedra y las entradas disponían de bloqueos preparados a partir de los registros y las cadenas para dificultar un posible ataque enemigo. Tenían, además, obstáculos para evitar que cualquier persona que no estuviera familiarizado con ellos pudiera cruzarlos. Los canales miden entre 100 metros y un kilómetro de largo, con un ancho de 10 metros y calado medio de 1,3 metros. Todos eran abiertos sin cerraduras y fueron construidos a través de istmos.
Los canales militares del lago Saimaa fueron utilizados frecuentemente por la flotilla rusa que tenía sus bases en Lappeenranta y Savonlinna y en la fortaleza Kärnäkoski. En poco tiempo perdieron importancia estratégica, pues sólo una década después, como resultado de la Guerra de Finlandia entre 1808 y 1809, Suecia cedió Finlandia a Rusia. La flotilla rusa de Saimaa se disolvió en 1810 y en 1816 la responsabilidad de los canales fue transferida a las autoridades civiles y el uso de los canales se redujo para uso local.
Fotos: Oakokko y Pauli Lindgren