A comienzos de 1962, la aerolínea española AVIACO fue la primera que voló en España el avión Caravalle, mediante un acuerdo de banalización con Sabena. Entendemos que tenía matrícula belga y es posible precisar fechas del contrato y del tiempo que permaneció en este servicio entonces en boga. La línea era Bruselas-Madrid-Canarias, volando los tramos nacionales con tripulaciones españolas.
El comandante e historiador aeronáutico José Ramón Marteles, autor del libro de la historia de AVIACO (1998), dice, refiriéndose a este avión, que era “el ‘segundo travesti’, del que no tenemos datos registrales, si los hubo”, aunque afirma que se anticipó el primer Caravelle VI-R de Iberia (EC-ARI), que causó alta el 25 de febrero de 1962.
Y agrega que “la política de cesión, con banalización o sin ella, de las flotas IB-AO, hace que desde la integración de tripulaciones hasta volver a la operación propia, sea difícilmente conocer exactamente los aviones volados por AVIACO como tal”.
AVIACO adquirió en 1973 cuatro aviones Caravaelle VI-R procedentes de Iberia, así como otros siete Caravelle 10-R, entre ellos el matriculado EC-CAE (“ese cae, en malévolo andaluz”, escribe Marteles, que sería rematriculado EC-BDC.
Foto: archivo de Juan Carlos Díaz Lorenzo